Rusia anexó Donetsk y Lugansk y las sureñas de Jerson y Zaporiyia, parcialmente controladas por su Ejército, luego de referendos de incorporación a considerados ilegales por Ucrania y sus aliados occidentales.
En un comunicado, el servicio de seguridad ruso identificó al sospechoso como Bogdán Tsiganenko, quien habría colaborado con la presunta autora material del crimen, Natalia Vovk. Hay un rumor de que la mujer fue hallada muerta.
A pesar de la retirada por decisión propia del país, la reunión de la Asamblea General Extraordinaria sigue adelante y los Estados miembros votarán igualmente si lo suspenden.
Los abogados de Marina Ovsiannikova no logran contactarla desde que irrumpió al aire con un cartel contra la invasión a Ucrania. El Kremlin calificó lo sucedido de "vandalismo".
El presidente Vladimir Putin desestimó condenas y sanciones internacionales y advirtió que cualquier intento de intervención tendrá "consecuencias que nunca han visto".