Esta madrugada la Cámara de Diputados convirtió en ley la reforma de alquileres con los cambios incluidos por el Senado que había impulsado el oficialismo. Por 128 a favor y 114 en contra quedan confirmadas las modificaciones: los contratos entre propietarios e inquilinos se mantendrán por tres años y tendrán una actualización semestral, en lugar de anual como establecía la norma actual.