En esta elección se está dando una práctica que era considerada aislada tras la nueva república de la Constitución de 1888, el abuso electoral de patrones hacia empleados, ya que el Ministerio Público del Trabajo recibió 172 denuncias de asedio electoral en 21 estados y Brasilia durante la campaña.
El expresidente de Brasil y candidato del Partido de los Trabajadores (PT), Luiz Inácio Lula Da Silva, resaltó sus logros al frente del país ya que fueron “los momentos de mayores conquistas, de mayor inclusión”.
En el último tramo para las presidenciales se reportó un nuevo homicidio de un simpatizante del Partido de los Trabajadores (PT), que se le suman a otros hechos similares ocurridos en los últimos meses.
El expresidente de Brasil y candidato presidencial se reunió con el encargado de negocios Douglas Koneff, principal autoridad de la embajada de Estados Unidos. La reunión duró una hora y media y fue vista como un gesto del presidente estadounidense ante la posibilidad de que Lula pueda convertirse en mandatario electo el 2 de octubre.
A poco de sos semanas para los comicios, una encuesta de reveló que la mayoría teme ser agredidos "físicamente por su elección política o partidaria". El los últimos días se registraron dos asesinatos de electores de Lula a manos de seguidores de Bolsonaro.
En un acto de campaña en el estado de San Pablo, Lula se refirió a Bendito Cardoso dos Santos, de 44 años, quien fue asesinado a cuchillazos y hachazos por Rafael Silva de Oliveira, de 22 años, por una discusión política.
El autor del crimen, identificado como Rafael Silva de Oliveira, de 22 años, asesinó Bendito Cardoso dos Santos, de 44 años, a cuchilladas y hachazos, precisó la fuerza de seguridad.
Desde hace más de una semana no hay noticias de Dom Phillips y Bruno Pereira, quienes realizaban entrevistas para un libro sobre conservación ambiental en la región del Valle de Javarí, en la Amazonia brasileña.