García contrastó la perspectiva presentada por Milei con las posibles implicancias para Tierra del Fuego en caso de que su propuesta se materialice. “En principio tuvimos una prórroga por 15 años en el año 2021, resoluciones en donde las empresas ya adhieren, creo que sobre esa situación hay un esquema jurídico que sería difícil que alguien intente avasallar o no cumplir sin que uno recurra a la justicia y por otra vía consiga la continuidad”.

“No creo que a nadie se le ocurra ir en contra de algo que ya se aprobó, porque básicamente hay derechos adquiridos, es difícil pensar que alguien vaya contra eso”, sin embargo enfatizó, “Lamentablemente no es necesario ir contra los decretos para que la actividad productiva de Tierra del Fuego se resienta”.

En ese marco de análisis, abordó los efectos de una reducción tributaria generalizada como la que propone en candidato libertario, “Como provincia ya conocimos contextos económicos donde los beneficios de la ley tenían continuidad pero la actividad productiva caía a niveles bajísimos. Con lo cual si imaginamos por ejemplo un esquema de reducción de impuestos internos o aranceles sobre productos electrónicos, seria probable que eso resienta la producción local”.

“Como en algún momento que se eliminaron los aranceles a las notebook con la idea de que eso iba a hacer bajar los precios y permitir un incremento de la oferta, y la verdad es que desapareció la producción nacional de las notebook y los efectos que se esperaban después no sucedieron necesariamente”, observó.

A partir de esto, García describió: “Hay modelos económicos como estos que tienen una fe ciega en el mercado que pueden ser muy peligrosos, no solamente para la provincia sino para muchísimos sectores de la economía Argentina. Cuando uno encima lo combina con un esquema de tipo de cambio fijo por no hablar de dolarización, nos podemos remitir a la década del 90 donde la apreciación cambiaria combinado con liberalización generó niveles de desempleo altísimos y un esquema productivo muy diferente al que tenemos hoy”.

Luego, el secretario de Industria subrayó, “A mí me parece que esto hay que ordenarlo desde la política y no desde la justicia porque cuando el actor privado invierte, está en un esquema, y de repente le cambian las reglas del juego recurre a la justicia, eso es una posibilidad, pero repito, no necesitan atacar directamente al régimen para generar esos efectos, con medidas económicas de otra naturaleza que cambien el esquema económico en general, muchas cuestiones que dependen de eso se caen atrás y eso no es cuestionable jurídicamente”.

Por otro lado, hizo un balance de la actividad industrial bajo el amparo de la 19.640 en la provincia, “En 50 años del subrégimen no existió una herramienta como la que generamos en el 2021 y que se está empezando a implementar ahora que viabilice porque ejemplo las obras de infraestructura que son absolutamente necesarias para que la provincia sea competitiva”.

“Siendo una isla y no tener la mejor logística marina es algo que había que corregir así como generar herramientas de política industrial que sirvan para promover una ampliación de la matriz productiva que es absolutamente necesaria para la provincia, para mejorar la calidad de vida de la población, para ser más sostenibles. Hay una mirada que tiene que ser critica, la que mira cuestiones que se tienen que corregir y después hay otros relatos que tienen más el objetivo en los defectos o en resolver los problemas del desarrollo económico en cuatro o cinco años”, puntualizó.

“La mejor estrategia productiva para mejorar el bienestar social de manera sostenible, son de largo plazo y eso implica tener una mirada de acá a 20 años. Entonces que venga alguien a decir que esto se resuelve de un plumazo, es alguien que se quiere llevar todo puesto, esto cambia mucho cuando se tiene la posibilidad de hablar con tiempo, de explicar o demostrar cuales son las estrategias. Pero eso es comprensible porque desde Buenos Aires y sin ser un estudioso especializado en Tierra del Fuego, la gente le dedica un ratito, miran los números, no le cierran y se levantan enseguida la crítica, y en dos minutos vienen con la solución mágica como si todos los que estamos acá somos unos estúpidos o unos vivos que no somos capaces de verlo”, aseveró García.

En su análisis el secretario de Industria resaltó, en definitiva, “En realidad la discusión del desarrollo, insisto, es de largo plazo que requiere otro nivel de complejidad, que no se puede llevar adelante llevándose puesta a la gente, que hay que buscar transformaciones que tengan un sentido en el tiempo, uno tiene que imaginarse cuales son los sectores económicos que puedan desarrollarse de forma armoniosa con el medio ambiente, con la calidad de vida que esperamos y que tengan que ver con los recursos genuinos del territorio”.