Juan es un vecino de Río Grande, quien como consecuencia del contexto económico que atraviesa el país, decidió desempeñarse como Uber, siendo ésta la única herramienta que le permite generar ingresos para el sustento de su familia. Desde que se desempeña como Uber, habilitado por la plataforma, ha experimentado situaciones a las que calificó como “peligrosas”, como la persecución en la cual se vio involucrado, la cual detalló diciendo que, “un remisero conocido que le dicen ‘Copa’ y dos taxistas me corrían cruzándome sus vehículos e impidiendo que circule”.

Juan hizo un raconto de las situaciones que le tocó vivir: “El primer episodio ocurrió hace unas semanas atrás cuando dejaba una pasajera en el aeropuerto, ese fue el primer día que lo vi a ‘Copa’, solo me quedó mirando de manera insistente y cuando voy saliendo del aeropuerto casualmente, aparece personal de tránsito, situación que no me cabe duda fue gracias al aviso de este señor. Si bien no llevaba pasajeros en ese momento la multa fue por ser ‘Uber’, pese a que no hubo ningún tipo de prueba que respaldara esta acusación”.

“Posteriormente, alrededor de dos semanas después, -continuó relatando Juan-, voy a buscar a cuatro chicos al boliche que está en 25 de mayo y Av. San Martín, me encuentro con este remisero ‘Copa’, mirándome desde su auto y al ver que se subían pasajeros, me cruza el auto tratando de impedir que continúe, logro esquivarlo deteniéndome en el semáforo esperando que me habilite, una vez en camino hacia el destino de los pasajeros, durante todo el trayecto, vamos viendo a este señor como nos ‘corría’ literalmente, es más, los mismos pasajeros filmaban la situación como para tener algún tipo de prueba respaldatoria si es que pasaba algo. Al llegar a destino, dejo a los chicos, y rápidamente este remisero vuelve a cruzarme el auto, cuando me doy cuenta venía un taxista detrás de él, que nos sobrepasó y se cruzó en la parte trasera de mi vehículo, situación más que violenta que en ese momento me produjo mucho miedo. Logré esquivarlos realizando maniobras, me adelanté un par de calles, cuando me quiero dar cuenta ya eran ‘Copa’ y dos vehículos taxi los que me perseguían. Llego de casualidad a la comisaría que está en Chacra XIII, me metí en contramano y bajé de inmediato, atrás mío también lo hicieron estos tres sujetos”

El policía que estaba tratando de tranquilizarlos ante los insultos y acusaciones también hacia ellos diciéndoles que ‘ustedes defienden a estos delincuentes’ llamó a personal de tránsito para intervenir. El inspector me trató muy bien, me habló y me explicó que solo me podía multar si estaba trabajando como Uber y en ese momento a él no le constaba por lo que terminé yendo a mi casa, después que estos señores (el remisero y los dos taxistas) se retiraron.

Juan prosiguió con su relato de hechos que ahora visibiliza por su seguridad: “Ese mismo día pasaron como dos horas, calcula creo que eran las 9:00 hs. porque recién abría Carrefour, cuando estoy estacionando sobre la Av. San Martín me encuentro con este ‘Copa’ estacionando por Piedrabuena a los gritos y acusándome ‘vos me chocaste, a mí me das todos los papeles del auto’, sucedió que durante la persecución en el momento que lo esquivo luego de que me encerraran con el auto junto al taxista uno de cada lado, presumo que quizás debo haberlo tocado y digo haberlo porque mi auto no tiene nada, a los sumo lo habré raspado no sé”. Logré finalmente entrar al Carrefour evadiendo todo tipo de insulto de este señor, por ahí en la caja ya me doy cuenta que esta vez está estacionado atrás del auto, espere un rato hasta que se fue”.

Finalmente, Juan detalló el último hecho que denuncia, claramente el más grave de todos por lo intimidatorio: “Fue hace unos días, pero hoy me levanto para ir a trabajar y me encuentro con los cristales derechos traseros rotos, en el interior de mi vehículo había municiones de plomo, unas tres o cuatro, de algún arma de aire comprimido, no son armas de fuego, pero te dan en la cabeza y te matan. Inmediatamente di aviso a la policía, vino investigaciones y realicé la denuncia. No puedo culpar a ‘Copa’ ni algún taxista porque no los vi. Si me llama mucho la atención y es inevitable que lo relacione con estos episodios violentos, pero no puedo acusar. Soy un laburante, ganándome la vida como puedo, sin enemigos, jamás tuve problemas con nadie y ahora me veo así, teniendo que cuidarme y con temor a circular o que me pase algo” finalizó.