La medida, la cual se hace efectiva a partir de hoy en la Ciudad de Buenos Aires, contempla un aforo del 30% para cines y del 50% para salas teatrales y podrá ser modificada en función de la situación epidemiológica de cada región.

El miércoles, el Boletín Oficial difundió la decisión administrativa 607, que informa que “el Ministerio de Cultura de la Nación ha peticionado que se arbitren las medidas para que, en los lugares considerados de alto riesgo epidemiológico y sanitario y en situación de alarma epidemiológica y sanitaria, se autorice la realización de las actividades relativas al cine y al desarrollo de artes escénicas (música en vivo, teatro, danza y circo) con y sin asistencia de espectadores”.

En ese sentido, Carlos Rottemberg expresó sus sensaciones en cuanto a este momento tan esperado por la comunidad artística: “Estoy convencido de que estas iniciativas salen fundamentalmente porque siempre mantuvimos la premisa de priorizar la salud y defender las fuentes de trabajo;  para eso estuvimos unidos, todos con el mismo fin común dentro de la actividad que es defender las fuentes laborales, crear proyectos, brindar seguridad con los protocolos consensuados. Eso resulta en el bienestar de una comunidad artística que desde hace 15 meses ve realmente mermada sus posibilidades a partir de este flagelo solitario que nos atravesó. Este es un momento de alegría, poder tener el regreso de la actividad y en condiciones más aptas para que se pueda desarrollar”.

Cabe destacar que quienes estén vinculados al desarrollo de estas actividades deberán portar un Certificado Único Habilitante para Circulación. De igual forma, el público asistente también deberá justificar su circulación, mostrando los tickets de acceso al espectáculo, los cuales deberán especificar la sala a la que se asistió, el título de la obra o concierto y artista, el horario de la función y el número de la butaca que se ocupó.