Tania Sandoval es una fueguina residente en Río Grande logró escalar y hacer cumbre en el Aconcagua, el pico más alto de la Tierra después del sistema de los Himalayas.

En una entrevista con FM FUEGO habló respecto a su travesía: “Noté hace poco que hubo una repercusión con mucho interés en la gente por este hecho, es muy lindo. No me había puesto como objetivo el Aconcagua, empecé a hacer montañismo hace 8 años y me habían invitado algunas veces pero nunca me animaba, me parecía muy exigente. Pero finalmente dije vamos, entrené más fuerte y me preparé para ver qué pasa”.

“Iba a dos gimnasios en simultaneo,-continuó diciendo Tania-, por las disciplinas y comencé a prepararme psicológicamente. No es solamente físico el asunto, he visto personas sin piernas escalando a la cumbre y gente con otros tipos de dificultades. La exigencia mental es quizás lo fundamental”.

“Vivo en Río Grande desde que tengo 4 años, pero soy oriunda del Chacho”, explicó.

En esta línea habló de cómo se preparó con el clima de Tierra del Fuego: “El frío, viento y lluvia de la provincia me sirvieron muchísimo para entrenar”.

Expresó además Tania: “Fui con un compañero que ya hizo cumbre 3 veces, lo que me dio una seguridad. Dos extranjeros perdieron la vida, pero he visto bajar a personas de a grupos por las descompensaciones, lo que te genera una sensación de ‘uh, dónde me metí’. Desde que inició la excursión, el 13 de enero, subiendo y aclimatándome, llegamos a cumbre el 24 de enero. El tema, quizás, es bajar. Hicimos el campamento base de altura en Nido de Cóndores, hace mucho frío tan alto y hasta que no sale el sol vas sufriendo”.

“Y la última jornada fue bastante complicada, muchas horas, de hecho bajamos en la noche. En la cumbre no se puede estar más de 40 minutos, ese día fue nublado. Quizás fue el día que más caminamos, menos horas dormimos, nos hidratamos poco porque se congelaba el agua y comimos casi nada. Los mareos y el dolor de cabeza son síntomas normales, dábamos tres pasos, respirábamos profundamente, y nuevamente otros tres pasos. El clima desmotiva a la gente”, detalló.

“Honestamente, para mí terminé realmente cuando llegué a la camioneta para volver. Porque era una cumbre hasta llegar abajo. Ocurren a veces cosas que se tienen que manejar con serenidad, no hay que entrar en pánico. Volvería a ir, corregiría muchas cosas que hice mal como la alimentación. Con este nuevo conocimiento y experiencia”, finalizó diciendo Tania Sandoval.