Al respecto, Alejandro Almonacid Valdez, Gerente de Operaciones y Nuevos Negocios, dio detalles del encuentro con autoridades locales con el fin de analizar el desarrollo económico, prepararse para la temporada alta y mejorar el servicio.

“La semana pasada estuvimos visitando a un cliente, nos reunimos igual con la Cámara de Comercio, con el Cónsul y con algunas autoridades de la zona para ir de alguna manera visualizando el desarrollo económico, la temporada alta que para nosotros es importante también, de octubre en adelante y poder de alguna forma proyectarnos para brindar un mejor servicio”, indicó.

Por su parte, Almonacid Valdez explicó que la compañía realiza ajustes tarifarios semestrales en marzo y septiembre, basados en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de Chile y otras variables como el costo del combustible. Sin embargo, señaló que la empresa se esfuerza por mantener las tarifas lo más estables posible para no afectar a los clientes argentinos.

“Lamentablemente el ajuste en el tipo de cambio lo tenemos que hacer de forma reiterada, para los clientes argentinos. Como compañía no podemos operar como negocio cambiario, por lo tanto nuestro único vínculo con el peso argentino es recibirlo y cambiarlo en una casa de cambio, que son quienes funcionan en ese negocio”, y añadió en ese sentido: "Hacemos todo el esfuerzo por mantener las tarifas, a veces por una o dos semanas, pero también tenemos la obligación de mantener nuestro negocio, de rentar y hacer sustentable la ruta”.

Destacando que “A la larga, esto es importante también porque en definitiva, si nosotros perdemos de vista que esto es un negocio, en algún momento el servicio puede decaer o dejar de dar una calidad de servicio, y eso sería perjudicial para toda la gente de Tierra del Fuego".

En ese sentido, precisó sobre el número de usuarios en este territorio, “En general la barcaza tiene un volumen entre el 60% y 65% de argentinos en temporada normal o promedio, y de ahí tenemos los picos en periodo de vacaciones o feriados que tienen en Argentina. Eso aumenta un 75%, llegando a un 80% en vacaciones”.

En cuanto a la situación económica, el gerente expresó que la peor etapa en cuanto al flujo y al movimiento industrial en Río Grande parece haber pasado, y que se espera un repunte en la actividad a partir de septiembre. En un primer balance de este encuentro nos podemos quedar con que la peor etapa en cuanto al flujo y al movimiento industrial en Río Grande ya pasó, según nosotros fue entre marzo y junio, y en julio y agosto ya se ha venido remontando un poco la actividad”.

“Al menos de septiembre en adelante se visualiza que podamos retomar los volúmenes y la cantidad de camiones, que al menos estábamos acostumbrados y que se venían dando históricamente. Hoy en día ya tenemos una cartera y una condición de pago mucho más regular, al menos tenemos flujos constantes, siempre existen algunas dificultades pero son las menores, pero existe una rigurosidad a medida que ha pasado el tiempo permitiéndonos a nosotros una estabilidad”, expresó finalmente.