La presidente de la Cámara de Comercio de Ushuaia, Claudia Fernández, brindó un panorama de cómo se encuentra las ventas en la capital fueguina, “Suponíamos que en el mes de junio podíamos quebrar esa consecutiva baja en ventas que se venía en los últimos 5 meses, por el día del padre, pero lamentablemente volvimos a tener una baja en venta”.
De esa forma y pese al ingreso de turistas, la situación continúa agravada en función del aumento de costos en todos los aspectos. “A los comerciantes, pymes y demás, los deja en una situación de sorpresa e incertidumbre más que nada que los paraliza”.
A continuación, Fernández, comentó, “Tenemos un problema importante que es la reposición de materia prima porque las fábricas no están trabajando al 100%, entonces cuando se hace un pedido llega la mitad porque no hay entregas”. En ese margen, recalcó: “Entonces por un lado nos cuesta poder tener lo que queremos ofrecer y por otro el precio de venta, porque cuando formamos ese precio y luego lo vendemos, después cuando hay que reponer no alcanza para comprar algo nuevo”.
“En realidad el objetivo de todos nosotros es vender y a veces nos está dando miedo hacer nuestra actividad, por miedo a destruir un poder de poder. Esto sumado a la inflación, a la situación que tienen nuestros clientes, que están siendo muy prudentes en los gastos y las tarjetas que no logramos que se puedan actualizar los montos de consumo que queda desfasado”, y añadió. “Muchísimos están optando por la compra en cuotas de comida, realmente preocupa. Está optando por pagar el mínimo y el costo de financiamiento de tarjetas es muy alto, y la bola va creciendo a un paso que después no se puede manejar”.
En cuanto a la característica del turista que llega a la capital fueguina y que no permite la reversión de esa realidad dijo, “La mayoría consume restaurantes o confiterías y le siguen los negocios de recuerdos o chocolates. Son esos comercios los que levantan ese porcentaje de ventas, lo que es indumentaria o marroquinería realmente no consumen. No es el turista de compras compulsivas y demás, en la calle vemos a muchos turistas caminando pero no los vemos con las bolsas de compras como se veía en otras temporadas”.
Frente a este difícil panorama y la falta de previsibilidad económica en un contexto nacional marcado por las elecciones, Fernández apuntó, “Nos paraliza el no tener un camino que nos diga que en dos meses vamos a estar mejor, realmente la macroeconomía nos golpea mucho pero más al pequeño y al mediano, al que no tiene la capacidad de recomposición como lo pueden llegar a tener las grandes empresas. El panorama es de incertidumbre e intranquilidad, en decir ‘no hagamos grandes inversiones’, vamos a esperar que pase esto y ver las soluciones”
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