Señalan que muchas veces se detecta la presencia de personas ajenas al barrio, algunas con capucha, merodeando las calles, “Notamos que personas que no son del barrio merodean con capucha. Nos avisamos entre vecinos por el grupo, y al poco tiempo alguien confirma que sufrió un robo”, relataron.
Agregaron que sienten que las denuncias no alcanzan y que los patrullajes no están dando resultados. “Queremos vivir tranquilos. Cada vez que alertamos sobre algo, luego se confirma un robo. La policía pide colaboración con cámaras, pero todo termina sin soluciones”, señalaron.
Comentarios