En una nota para FM FUEGO, Alejandro Poudes en primer término hizo referencia los desafíos institucionales que enfrenta hoy el cannabis medicinal, “Su desarrollo es muy amplio, es una medicina que nos enfrenta a tener que trabajar de manera diferente, ante lo cual no es una situación que podamos trabajar uno a uno, como hacemos en muchos otros casos en la cual prescribimos medicación que sabemos dónde se puede conseguir y cuál es la trazabilidad farmacológica del comprimido o jarabe que se está recetando con los miligramos específicos”.

“Eso no lo podemos garantizar hoy por hoy en Argentina, si en otros países del mundo, ya que existen productos farmacológicos con compuestos fitocannabinoides a una cantidad precisa”, y continuó relatando “Entonces lo abordamos desde un lugar un poco más artesanal podríamos decir, lo que nos requiere trabajar si o si de manera interdisciplinar; con varios profesionales dentro de un mismo consultorio, como por ejemplo el dispositivo de atención clínica que hoy contamos dentro de la provincia”.

Sobre los controles en el marco de la organización del Gran Premio de la Hermandad, dijo al respecto “Desconozco la sensibilidad del test pero quiero remarcar que en Argentina contamos con un registro nacional de prescripción de cannabis medicinal que se llama REPROCANN. Podría ser que de positivo, no lo puedo descartar, pero tendríamos que estudiar el tipo y la marca del test que se utilizan en este tipo de controles”.

En esa línea, Poudes detalló que este registro “Vincula a aquellos usuarios y consumidores de cannabis medicinal con médicos prescriptores, que según la ley vigente solo lo pueden realizar profesionales de la salud con el título de médico y odontólogos”.

“Específicamente hay algunas preguntas dentro del registro, que es si el usuario utiliza o no máquinas de alta precisión, en el cual uno pueda suponer que el consumo pueda alterar su percepción y tener algún tipo de accidente. Siempre que se prescribe evaluamos todo el contexto de la persona, que dosis y cuál es la vía de administración, que son muchas pero la más difundida tiene que ver con la vía oromucosa que son los aceites que se utilizan de manera sublingual”, enfatizó.

De la misma manera que la vía de cannabis inhalado “Es la vaporación o el fumar cannabis, esto tiene que ver que esta vía brinda beneficios importantes ya que tiene una biodisponibilidad muy rápida y de corta duración. Pero en este tipo de situación hacemos énfasis en que la persona debe estar en un ambiente cuidado porque puede favorecer la expresión de efectos adversos como pueden ser vómitos, mareos, dolor abdominal, diaforesis. La indicación a estas personas con un tratamiento oncológico o paliativo se les recomienda siempre no manejar o utilizarlo de determinada forma u horarios”.