Los directivos se sumaron así a las medidas de fuerza por mejoras salariales. "Se rompe la cadena de mando del Ministerio de Salud", explicó el titular de la Federación Médica

Los 250 jefes de servicios y departamentos de los hospitales públicos de Perú renunciaron en solidaridad con el reclamo de la Federación Médica, que exige un aumento de los salarios y una mejora de las condiciones de trabajo.

Según explicó el presidente de la FM, César Palomino, la medida de fuerza permite que “se rompa la cadena de mando del Ministerio de Salud", del cual dependen los hospitales afectados. "Los médicos del Ministerio son irremplazables, para ocupar sus cargos hay que tener años de experiencia y haber ganado concursos para su admisión", subrayó.

Por su parte, el director general de Descentralización del Ministerio de Salud, Arturo Granados, sostuvo que la amenaza de las renuncias no contribuye a la solución del conflicto. "No podemos hacer un diálogo cuando alguien nos pone una pistola en la cabeza a nosotros, a los pacientes y usuarios", dijo.

La huelga en Perú ya lleva 15 días y comprende a 15 mil galenos. El reclamo incluye también la supuesta intención de privatizar el Instituto Nacional de Salud del Niño, algo que ha sido rechazado por la FM.

Desde que empezó la protesta, el 16 de julio, los servicios médicos en los hospitales públicos han quedado reducidos a las atenciones de emergencia.