Fue en mayo del 2021 cuando empezó el conflicto en Digital Fueguina y los trabajadores, desde ese entonces, no tienen respuesta alguna, más allá de los intentos fallidos que han tenido hasta ahora. Dos referentes de los trabajadores, Marcos González y Daiana Kothbaaue, hablaron de esta dura realidad con FM Fuego:

Marcos González: “Ahora en mayo vamos a estar cumpliendo un año desde que comenzó todo este conflicto. Después del mes de diciembre donde se hicieron todas las tratativas e íbamos a empezar a producir, retomando la producción de Newsan, pero el último día del año se cortó todo porque dijeron que no nos puede mandar los materiales que nos faltan para producir, quedó todo en foja 0, no hay ninguna novedad. Es mucho tiempo el que ha pasado en el cual se sigue peleando por los trabajadores, esperando una respuesta, más allá de todas las dificultades que tenemos, las únicas novedades son las de público conocimiento, que dijo la Ministra sobre la posibilidad de algunos inversores, pero hasta que no se concrete nada son solamente palabras, porque lo único que tenemos son inversores que siempre vienen y así como vienen se van. Son 250 realidades diferentes, sabemos que hay gente que ya empezó a trabajar en otros lugares, pero la gran mayoría, por edad o por todo lo que esto con lleva, no han podido conseguir ningún trabajo en estos 10 meses que llevamos. Reconocemos que tanto del municipio como de gobierno nos mandan los módulos todos los meses, hay a algunos compañeros que le dan ayuda para el alquiler, pero eso no es suficiente para todos los problemas que tenemos, es complicadísimo hoy en día con los costos, cada vez es más difícil levantar las deudas que teníamos. Tenemos fe que en algún momento volveremos a trabajar, una muestra que la gente quiere volver a trabajar es lo que se ve todos los días fuera de la fábrica, compañeros vendiendo productos de panadería, vendiendo tortillas, empanadas”.

Daiana Kothbaauer: “Ante la falta de respuestas que tenemos, no nos queda otra opción que seguir vendiendo para tratar de encontrar una salida como sea, por eso los compañeros decidieron abrir nuevamente los panificados, tratando de comprar las cosas, porque la realidad es que hubo que empezar de nuevo. La solución no está en dejar abandonada la fábrica, tenemos que seguir acá, dando pelea, porque esto se tiene que reactivar, no podemos perder 300 puestos de trabajo en la provincia, esperamos que las personas que puedan llegar a solucionar esto se muevan, porque la propuesta de supuestos inversores, este año han venido muchísimos compradores, pero no pasa nada”.