Tras un fin de semana de protestas que provocaron pérdidas millonarias, afectaron a más de 37 mil pasajeros y paralizaron la actividad en los principales aeropuertos del país, los gremios consideran la posibilidad de nuevas medidas, incluyendo un nuevo paro este fin de semana. Otra opción que barajan es interrumpir las actividades en los centros de capacitación de pilotos y auxiliares, lo que podría generar retrasos en la renovación de permisos de trabajo.

Paralelamente, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) y el personal de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) anunciaron un paro para este jueves. El cese de la prestación de servicios afectará a 27 aeropuertos en todo el país y se realizará en dos turnos, de 6:00 a 12:00 y de 17:00 a 22:00, impactando en los vuelos comerciales, aunque se garantizarán los sanitarios y humanitarios.

Marcelo Belelli, secretario general de ATE/ANAC, afirmó que, a pesar de no haber avances en el diálogo con el gobierno, la medida de fuerza sigue en pie, aunque señaló que buscarán una solución para normalizar las operaciones.

Uno de los puntos críticos del conflicto es la decisión del gobierno de aplicar el decreto de Javier Milei, que obliga a los sindicatos a notificar cualquier medida de fuerza con 5 días de anticipación y a garantizar un 50% de los servicios para evitar que las protestas sean declaradas ilegales.

Los gremios, encabezados por APLA y AAA, anunciaron que no acatarán el decreto y llevarán la impugnación a la Justicia, alegando que atenta contra el derecho de huelga y viola normativas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).

Pablo Biró, titular de APLA, expresó que recurrirán tanto a la OIT como a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para frenar la medida gubernamental. El sindicato de pilotos, además, se prepara para resistir la decisión del Gobierno de excluir a Biró del directorio de Aerolíneas en la asamblea de la empresa que fue citada para este viernes.

El secretario de Transporte, Franco Mogetta, anticipó que el gobierno reclamará al sindicato por los daños ocasionados a Aerolíneas, mientras que Fabián Lombardo, presidente de la aerolínea, afirmó que la decisión de excluir a Biró es un trámite administrativo impulsado por la Secretaría de Transporte, principal accionista de la compañía.

Desde los gremios aeronáuticos sospechan que el endurecimiento de la gestión de Milei contra Biró se debe a que desde el Gobierno apuran la privatización o incluso el cierre de Aerolíneas Argentinas. Más teniendo en cuenta que en el último mes el PRO presentó un proyecto en el Congreso para poner en venta esta empresa estatal.