Báez había sido condenado en la causa conocida como la “Ruta del Dinero K” por lavado de dinero agravado, y también en el expediente “Vialidad” por defraudación al Estado, con una pena unificada de 15 años de prisión. Desde 2022 cumplía arresto domiciliario en su vivienda de El Calafate, pero en junio pasado fue trasladado al penal tras una resolución del Tribunal Oral Federal N° 4, que ordenó su detención efectiva al considerar firme una de las condenas.
La defensa había solicitado la continuidad del arresto domiciliario alegando problemas de salud, pero el planteo fue desestimado. Los jueces Javier Carbajo y Gustavo Hornos señalaron que no estaban acreditados los requisitos para el beneficio, mientras que Mariano Borinsky votó en disidencia, al considerar que no se evaluó adecuadamente la situación médica del empresario, quien había cumplido durante cinco años con las condiciones de la detención en su domicilio.
De este modo, Báez continuará cumpliendo su pena en el penal de Río Gallegos.