En la sala de comisiones los ediles mantuvieron un encuentro con representantes del INTA, quienes explicaron los fines que tiene el programa Pro Huerta, y la necesidad de modificar el artículo 19 de la ordenanza 2941/11 a los efectos de poder hacer entrega dentro de este programa de pollitos a las distintas huertas que tiene la ciudad.

Asimismo indicaron que la entrega es de un máximo de cinco pollitos hembras.

La reunión fue encabezada por la titular de la comisión de Turismo, Ecología y Medio Ambiente, concejal Laura Colazo, siendo acompañada por los ediles Héctor 'Moncho' Garay y Esteban 'Chiquito' Martínez, mientras que en representación del INTA estuvieron el ingeniero Paulo Gea y la veterinaria Cecilia Escribano.

Luego del encuentro, la concejal Laura Colazo señaló que “nosotros hemos tomado esta inquietud y esta dificultad que tiene el INTA hoy para realizar la entrega de los pollos a aquellas familias que ya tienen una huerta en la ciudad dentro del programa Pro Huerta, que a nivel personal considero que es un excelente programa, que no solamente habla de una decisión a nivel nacional de fomentar la agricultura familiar, sino también hace a la soberanía alimentaría y sobre todo al autoabastecimiento que creo que es la gran dificultad en Río Grande”, dijo, al tiempo que resaltó que “es una aspiración que tenemos nosotros que un día iniciemos el camino hacia ello, de tener mayor disposición de frutas, de verduras, y en el caso de los pollos, la proteína tan necesaria para el consumo de Río Grande”.

En tal sentido hemos propuesto permitir a través de la “legislación municipal que se haga la entrega de estos pollos a cada familia que así lo desee, y cumpla por supuesto con toda la normativa y reglamentación realizada tanto por INTA como por el SENASA”.

Para poder realizar la entrega de estos pollitos a las diferentes familias que se encuentran dentro del programa Pro Huerta, la edil explicó que se debe “realizar una modificación a la ordenanza 2941/11 en el artículo 19, para permitir que se haga la entrega de estos pollitos para las familias de Río Grande que estén dentro del programa, y esto va en consonancia con un trabajo que nosotros tenemos desde nuestro espacio que tiene que ver con una ciudad sustentable, y tener una ciudad sustentable también habla de tener un colchón productivo, donde podamos fomentar todas las actividades que llevan adelante las chacras y los productores de la ciudad, tanto a través de los viveros, donde se están dando créditos de nación, pero además como una decisión y una política pública municipal, que es lo que nosotros queremos proponer en un futuro para nuestra ciudad de Río Grande”.

Por su parte, el ingeniero Paulo Gea manifestó que el motivo del encuentro fue porque el “programa Pro Huerta trae a Tierra del Fuego pollitos bebes, esos pollitos son entregados a familias que tienen huertas, pero hay una reglamentación que en la actualidad no lo permite, entonces les hemos explicado a los concejales exactamente en que consiste este programa a nivel nacional y la posibilidad de que se pueda cambiar el articulo 19 de la ordenanza 2941/11 para poder hacer entrega de estos pollitos a las distintas huertas que tiene la ciudad”.

En tal sentido explicó que a los sobrantes de la huerta uno se los “puede dar de comer a los pollitos-gallinas que en su momento son gallinas ponedoras, y es la forma de obtener proteínas a través del huevo, y de la carne cuando la gallina se pone ‘vieja’ o dejan de poner a la dieta al autoconsumo”.

Recordó que a “partir del año 2011 una ordenanza municipal prohibía la tenencia de pollitos o de gallinas en todo el ámbito urbano, pero este programa es un programa nacional y esos pollitos se entregan bajo todas las medidas que nos determina el Pro Huerta como lo es tener un gallinero con todas las medidas de salubridad, y de higiene tal como lo dice el programa, tener una huerta, cursos de capacitación, además de hacer visitas a los lugares donde están los pollitos, donde se verifican las instalaciones, y recién ahí se determina quién se encuentra en condiciones de recibir o no este programa, dado que el mismo es muy especifico respecto a quien se entrega y a quien no, no se regalan pollitos así nomás sino que hay que pasar todas una serie de requisitos, siendo que el mismo es fiscalizado por el INTA como por SENASA”.

Por último resaltó que “la entrega de pollitos es de un total de cinco hembras y para consumo propio, y a SENASA le entregamos el listado de personas que lo reciben, de manera que sepa quien tiene los pollitos al momento de fiscalizar”, dijo, al tiempo que agregó que “hasta el momento la ordenanza actual lo prohíbe, esperemos que se cambie el articulo 19, teniendo en cuenta que en Río Grande hay una cultura rural-urbana mezclada en la ciudad, donde mucha gente vive en zona de chacras, de Apymema y nosotros tenemos registrado alrededor de setecientas huertas en toda la ciudad, donde todos los años entregamos las semillas y controlamos que se haga la siembra respectiva”.