En diálogo con FM FUEGO la especialista en dermatología, la Dra. Anahí Gutiérrez, se refirió a los cuidados a tener en cuenta a la hora de exponerse al sol teniendo en cuenta las altas temperaturas que se están registrando en la provincia: “La protección solar se recomienda todo el año, no solamente en el verano. Ocurre que hacemos hincapié en esta época porque la gente aprovecha y sale, recordemos que vivimos en una ciudad que prácticamente vive puertas adentro. Recomendamos la utilización de protectores solares de más de 30 FPS, renovándolo cada 2 horas, asimismo la utilización de anteojos para sol y ropa adecuada”.

En esta misma línea la Dra. Aclaró “El protector una vez abierto dura un año, luego de eso no cumple con la protección necesaria. Además hay que revisar que protejan de radiaciones ultravioletas, es decir que sean dermatológicos y esté comprobada su eficacia”, aclaró la doctora.

Sobre aquellos protectores solares que no protegen de las radiaciones ultravioleta, mencionó: “Siempre tenés protectores de laboratorio y otros que no han pasado por pruebas, en las farmacias está más controlado para evitar estos productos no regulados. Mientras la etiqueta diga que está abalado por laboratorios dermatológicos es seguro. Luego siendo más concisos en el factor de protección, el intervalo de 30 o 50 FPS lo recomendamos acorde al tipo de piel, el cáncer es mayor en las pieles claras por eso es preferible usar por encima de ese intervalo”.

“Nosotros no tenemos una exposición constante al sol, entonces la intermitencia es más peligrosa para la piel que aquellos que están acostumbrados. Algunos quieren salir y tomar el sol que no pudieron tomarse en todo el año, pero eso es más peligroso”, agregó.

Asimismo explicó: “Hay que utilizar protector media hora antes de salir y renovarlo cada 2 horas, no importa si vemos que afuera está nublado o el clima sea fresco, las radiaciones atraviesan los vidrios así que hay que colocarlo aunque nos desplacemos en vehículos. A veces nos preguntan por la vitamina D, la verdad es que no es necesaria mucha exposición para obtenerla, con solo 15 minutos basta”.

Sobre los peligros a las excesivas exposiciones al sol y sin protección indicó: “Favorece el envejecimiento cutáneo, la aparición de manchas, además crecen los casos de cáncer de piel y la gente no toma conciencia, tiene que ver tanto por la exposición intermitente como por las camas solares. No hay saludables, 30 minutos equivale a todo un día de estar expuesto al sol, son muchísimo más agresivas”.

“En otras provincias está regulado de manera similar al cigarrillo,-acotó la doctora-, advierten que da cáncer de piel, la gente debería saberlo. Siempre preguntamos si hay antecedentes de quemaduras solares cuando atendemos un caso, pero acá hay muchísimos que se producen por las camas solares”.

Asimismo, desarrolló algunos de los síntomas de esta enfermedad para poder evaluar un autodiagnóstico y concurrir al médico: “Siempre hay que hacer una revisación anual de toda la piel, a grandes rasgos: tenemos dos tipos el melanoma y el no melanoma; el primero es más agresivo, generalmente se desarrolla sobre los lunares, entonces si tenemos varios lunares o vemos que estos crecen de tamaño, volviéndose asimétricos, teniendo distintas tonalidades, o se sufre una elevación, debemos consultar de inmediato; el segundo puede aparecer con escamitas, granitos sangrantes y se da en zonas fotoexpuestas como cara y brazos”.

Por último la Dra. Gutiérrez se refirió a los tratamientos con productos, como el áloe vera, luego de sufrir quemaduras solares: “No recomendamos la planta directamente, pero si productos dermatológicos que estén sin toxicidades, geles o cremas ya preparadas. Pero insisto en que lo ideal es no llegar a eso. El daño en la piel es acumulativo, va lastimando el material genético. Los geles son sintomáticos, te mejoran en el momento únicamente, el daño ya está hecho”.