En las últimas horas de ayer la figura del Padre José Zink, emplazada frente al edificio municipal, en el Paseo Costanero, fue nuevamente blanco del accionar de vándalos que, amparados en el anonimato, volvieron a manipular la obra, sustrayendo piezas que conforman la escultura.
Esta figura recuerda a una personalidad destacada que importante aporte le ha hecho a nuestra sociedad y que, bajo ese precepto, fue erigida como homenaje. Respetarlos es respetar nuestra historia y a quienes nos representan.
Repudiamos este tipo de hechos y solicitamos a la comunidad que cualquier acontecimiento de este tipo sea denunciado.
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