La sesión, presidida por el diputado Martín Menem, contó con la presencia de 244 legisladores, mientras que 13 estuvieron ausentes. La votación reflejó las diferencias entre los distintos bloques políticos sobre el impacto económico del acuerdo.

Los representantes de Tierra del Fuego tuvieron posturas divididas en la votación del DNU. Santiago Pauli, de La Libertad Avanza, respaldó la iniciativa en línea con la postura oficialista, al igual que Ricardo Garramuño, de Somos Fueguinos, quien ha acompañado la medida del Gobierno Nacional.

Por el contrario, las diputadas Andrea Freites y Carolina Yutrovic, junto con Jorge "Koky" Araujo, de Unión por la Patria, rechazaron el decreto, en consonancia con la posición de su bloque, que ha cuestionado las condiciones del acuerdo con el FMI y sus posibles efectos en la economía del país.

De qué se trata el acuerdo con el FMI

El DNU aprobado habilita la renegociación de la deuda bajo un nuevo Programa de Facilidades Extendidas (EFF, por sus siglas en inglés), que extendería los plazos de pago hasta 2035. Este esquema contempla un período de gracia de cuatro años y medio, durante el cual Argentina no realizará pagos de capital al FMI, permitiendo aliviar la carga financiera y estabilizar la economía en el corto plazo.

El monto total del acuerdo aún no fue oficializado, pero estimaciones indican que oscilaría entre 20.000 y 25.000 millones de dólares. Parte de estos fondos se destinará a refinanciar vencimientos de deuda existentes –unos 14.000 millones de dólares– y otra parte a cancelar Letras Intransferibles del Banco Central. Estas letras, valuadas en aproximadamente 23.000 millones de dólares, representan un componente clave del activo de la entidad monetaria.

El secretario de Finanzas, Pablo Quirno, explicó que la tasa de interés del nuevo acuerdo sería del 5,63% anual en dólares, inferior a la que Argentina podría obtener en los mercados internacionales.

Con la aprobación legislativa, el Gobierno Nacional podrá avanzar en la etapa final del acuerdo con el FMI. Se espera que en abril, durante la reunión de primavera del Fondo Monetario y el Banco Mundial en Washington, el equipo económico argentino mantenga encuentros clave para definir los últimos detalles del convenio.