“Él es un paciente crónico renal por lo cual va a diálisis tres veces por semana. Su mano derecha fue operada tres veces porque se le revienta una venita y hoy en dia tiene una infección en la mano, y necesita ser intervenido nuevamente en la mano y un catéter al lado del corazón”, comentó Paola.

En ese marco de delicado estado de salud, preciso que tienen problemas con la obra social de gastronómicos, “Se hizo el pedido de cirugía el 27 de febrero y hasta este miércoles no teníamos respuesta, pero hasta hace un momento se comunicaron diciendo que como ellos no autorizaron en el Cemep se va a tener que operar en el hospital entre el jueves o viernes”.

“Pero con esto venimos peleando desde esa fecha para que la obra social se haga cargo, no quieren pagar evidentemente porque no tenemos respuestas. Llame a la central que está en Ushuaia y la respuesta fue que si yo era la mujer que había hecho el recurso de amparo, porque yo me dirigí a la defensoría federal para realizarlo por un abogado, por el hecho de que no respondían de la cirugía”, relató.

Asimismo, añadió, “También lo hice por la eritropoyetina, que es una inyección que se coloca dos veces por semana para diálisis, y que es vital para él, es como que un diabético no tenga su insulina”, como consecuencia de ello sostuvo, “En este momento tiene principio de desnutrición, está anémico a mas no poder, está con transfusiones de sangre, todo a raíz de que la obra social no me autoriza la inyección cuando el pedido lo hice el 8 de diciembre”.

Frente a este pedido, la mujer enfatizó la falta de respuestas, “Siempre tuvimos la misma respuesta, me dicen que auditoria tiene que autorizar, de la cual nunca autoriza nada, o sea no se están haciendo cargo de absolutamente nada. Su médico que es el doctor Granillo, me dice que haga lo que tenga que hacer, que no lo pueden tener sin esa inyección, que como digo, es vital”.

Por esta situación señaló las consecuencia: “Como dije está ahora con transfusiones de sangre, y esto lo complica si es que lo llaman para un trasplante, lo cual no podría ser porque tiene que estar cien por ciento bien en todos los sentidos. Entonces esto está complicando todo, además de su salud, y su salud mental porque hace varios meses está sin la inyección y con la mano así”.

Ahora bien, Ariel expresó su vivencia ante el diagnostico que tiene, “Hoy mi calidad de vida es muy nula dado que lo que tengo no me deja dormir, por el dolor no tengo apetito, no puedo comer, no puedo hacer nada, ni trabajar. La verdad me tiene muy para atrás esta complicación, si la obra social se hubiese hecho cargo todo sería más sencillo, simplemente es una operación en la mano, tienen que anular una fistula y poner un catéter nada más”.

Y dio detalles de la cirugía que debe realizarse en la mano, “Se revienten venitas y demás porque la fistula se descontroló y hace que las diálisis no salgan bien, y otra que hace es que se me siga hinchando cada vez más la mano, aparte de que me está agarrando infección. Ahora con esta obra social que no habilita la operación es impresionante el problema que me produjo”.

“En la noche es cuando me agarra un dolor impresionante y es cuando empiezo a pensar un montón de cosas, porque no me deja hacer nada. Aparte tengo una nena de 8 años que sufre a la par mía. Soy mecánico de moto, hace años que tengo el taller, mi vida era normal, tenía una rutina, andaba mucho en las carreras de motos pero hoy no puedo hacer absolutamente nada de eso”, declaró Ariel.

Finalmente, su esposa Andrea Paola reiteró su reclamo por la atención correspondiente, “A raíz de que pasó todo esto, hasta el jefe del hospital me ha ayudado para ver si le dan algún tipo de respuesta. Tanto de la inyección como de la cirugía, yo lo que estoy exigiendo a la obra social que se haga cargo y no den tantas vueltas. No puede ser que tarde tanto la inyección, me dijeron que estos trámites tardan como dos meses cuando saben que es vital que lo tenga dos veces por semana para diálisis”.