Liz Magnolia Ortega Castillo (24), la mujer que roció con combustible y prendió fuego a un bebé de un año y medio junto a su madre, fue condenada a prisión perpetua. Al mismo tiempo, su pareja, Adolfo Gerasimchuk (23), fue sentenciado a 14 años de cárcel ya que fue considerado partícipe necesario del crimen.

La sentencia fue dictada por el Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de La Matanza, integrado por los jueces Lucila Pacheco, Arturo Gavier y Diego Burgueño. Por su parte, Ortega podrá solicitar la libertad condicional el 18 de septiembre de 2056, a la edad de 57 años, mientras que su pareja cumplirá la pena el 18 de septiembre de 2035.

El aberrante hecho ocurrió el 19 septiembre de 2021, en Rafael Castillo, en una vivienda ubicada en la calle Sudamericana al 2100, donde vivía Laura Delgadillo junto a su hijo Liam. Aquella noche, la mujer y su pequeño llegaron a su casa en la moto de su pareja de aquel entonces, Agustín Sayago, quien en primer momento fue imputado pero finalmente se levantaron los cargos en su contra.

Sin embargo, al descender del vehículo se encontraron con que Ortega Castillo los estaba esperando. "Acá estás hija de puta", le gritó la mujer a Delgadillo mientras sostenía una botella de alcohol en una mano y un encendedor en la otra. En solo cuestión de segundos, la atacante prendió fuego a la mamá y a su bebé y procedió a escapar en una camioneta conducida por Gerasimchuk.

"Ella se reía, después de tirarme a mí, le tiró dos veces al bebé", relató la víctima que logró sobrevivir al ataque a pesar de haber sufrido graves quemaduras. Lamentablemente, el pequeño terminó con el 90% del cuerpo quemado y murió.

Cabe mencionar que la atacante era amiga de toda la vida de la víctima y ex pareja de Sayago, por lo que los investigadores concluyeron que el aberrante crimen fue cometido en un contexto de celos y traición en la que los acusados actuaron con alevosía.

"Perpetraron el hecho mediante un plan ideado, con el acuerdo premeditado, destinado a provocar el fallecimiento de las víctimas a través de la división funcional de tareas", consideró la fiscalía.

Si bien tanto el fiscal, Sergio Alejandro Antín, como los abogados de la víctima, Miguel Racanelli y Yair Fernández, habían solicitado perpetua tanto para Ortega Castillo como para Gerasimchuk, los jueces impusieron una condena menor para él ya que consideraron que solo fue responsable del ataque a la madre y no al bebé.

"No encuentro motivo para pensar que el mismo supiese de la presencia o de la posibilidad de afectación del menor", explicó el juez Burgueño según el fallo.