La norma se plasma en una publicación conjunta de los ministerios de Economía -donde orbita Transporte- y de Desregulación y Transformación del Estado, área de Federico Sturzenegger.
El Decreto 883/2024 establece la desregulación del transporte automotor de larga y media distancia y otorga a las empresas la libertad de fijar rutas, horarios, tarifas y tipos de vehículos sin necesidad de autorizaciones previas.
El artículo 19 del decreto presidencial señala que “En los espacios de acceso público de todos los puertos, aeropuertos y aeródromos nacionales podrán ingresar para el ascenso y descenso de pasajeros y su transporte hacia cualquier destino servicios de alquiler con taxímetros habilitados en cualquier jurisdicción y los vehículos de cualquier tipo de empresa prestadora del servicio de transporte automotor de pasajeros, sean estos contratados de manera tradicional o mediante la utilización de plataformas digitales”.
El texto también indica que "La Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y la Prefectura Naval Argentina, por ser las autoridades encargadas de la seguridad y el orden dentro de las jurisdicciones de los aeropuertos y los puertos, deben ser responsables de garantizar el acceso y la seguridad de los prestadores de los servicios involucrados".
En el caso de Río Grande, todas ellas están prohibidas por lo que aún es incierto el impacto que podría acarrear una decisión de este tipo.
Además, esta reforma contempla cambios significativos para el transporte de micros de media y larga distancia, eliminando clasificaciones previas en búsqueda de “simplificar” los requisitos necesarios para la operación de servicios interjurisdiccionales.