El rapero Travis Scott rompió el silencio tras la tragedia ocurrida en el festival Astroworld, en Houston, Texas, en la que murieron once personas aplastadas por una avalancha y aseguró estar "devastado".
"Estoy absolutamente devastado por lo que sucedió la noche pasada", escribió en una nota que fue publicada en sus redes sociales y añadió que sus "plegarias están dirigidas a las familias y todos los que fueron impactados" por lo sucedido en el multitudinario evento.
El artista demostró su "total apoyo" al departamento de policía de Houston mientras continúe la investigación sobre lo sucedido en el NRG Park, el predio donde se llevó a cabo.
"Estoy comprometido a trabajar junto con la comunidad de Houston para subsanar y apoyar a las familias necesitadas", manifestó Scott.
A modo de conclusión, señaló: "Gracias al departamento de policía de Houston, al cuerpo de bomberos y al NRG Park pro su respuesta inmediata y apoyo. Los amo a todos".
La publicación del rapero se llenó de críticas por no haber suspendido el recital cuando ya había fallecidos entre la gente y estampidas.
En las primeras horas, en las redes sociales circularon videos que mostraban a personas atendidas por los médicos mientras de fondo se escuchaba la presentación de Scott.
Asimismo, en otro video que generó polémica, se observa a dos jóvenes que subieron a una de las tarimas de transmisión para impedir que continuara el concierto pero el camarógrafo les pide que se alejen.
Según testigos, la gente se precipitó cuando el reloj que indicaba el momento en que Scott iba a actuar esa noche comenzó la cuenta regresiva.
Fue entonces que centenas intentaron acercarse hacia la valla de contención y presionaron a los que ya estaban allí.
"De repente, fue como si hubiera 13 'mosh pits'", contó Pablo Longoria, de 19 años, un estudiante universitario de Houston.