La salida de Matías Kulfas del ministerio de la Producción abre varios interrogantes. Uno que parece comenzar a esclarecerse a partir de una definición -que tiene naturaleza política pero alcances macroeconómicos-, es la de una nueva arquitectura que de a luz un flamante ministerio de Energía. Esto implicaría la separación del área correspondiente que, hasta ahora, dependía de la cartera de Economía.
En el Gobierno confirman que este diseño está en carpeta desde hace tiempo, pero que la salida de Kulfas seguramente dará impulso a la secuencia que podría derivar en algunos reacomodamientos. En opinión de las fuentes consultadas, el momento político parece oportuno, sumado a la posibilidad de “ordenar” la política energética nacional, cuya ejecución estuvo marcada en los últimos años de desaciertos, marchas y contramarchas y hasta cierta ineficiencia.
Otro elemento a tener presente, es que el presidente Alberto Fernández acaba de llegar de Europa donde presentó a la Argentina como futura proveedora de materias primas y, sobre todo, uno de los referentes en la venta al exterior de gas y petróleo.
En esa línea, Energía Argentina realizó ayer el llamado a licitación pública para la construcción del gasoducto Presidente Néstor Kirchner, una obra estratégica que permitirá ampliar en un 25% la capacidad del sistema de transporte de gas natural y ayudará a desarrollar la producción creciente en Vaca Muerta.
El ducto tendrá una extensión de 563 kilómetros entre la localidad neuquina de Tratayén y Salliqueló en el oeste de la provincia de Buenos Aires, atravesando Río Negro y La Pampa. El proyecto también incluye obras complementarias como el gasoducto Mercedes-Cardales.
Esta obra, que se financiará en parte gracias al aporte solidario a las grandes fortunas, se encuadra dentro de las acciones que viene realizando Energía Argentina para el logro de los objetivos propuestos en el marco del Decreto 76/2022 como son la provisión de cañerías, estudios de impacto ambiental, y procesos para adquisición de bienes complementarios para la puesta en marcha del gasoducto.
Un aspecto a tener en cuenta es el escenario internacional. La figura de un ministro de Energía, señalan, apuntaría a consolidar un plan para que la Argentina pueda convertirse en un competidor en el mercado del Gas Natural Licuado (GNL) global, con el desarrollo del yacimiento de Vaca Muerta que, según mencionó esta semana el diario financiero británico Financial Times, sustituiría las importaciones de energía rusa.
"La salida de Occidente en Rusia revive las esperanzas para acelerar el desarrollo del deposito de Vaca Muerta", subraya el artículo del Financial Times. Según un reciente reporte de Standard & Poor´s citado por el diario, de acelerarse la producción de gas en Vaca Muerta, Argentina se podría convertir en "un rival de Australia y Qatar en el mercado mundial de Gas Natural Licuado (GNL) en un momento donde la demanda del mismo está creciendo".
El yacimiento de Vaca Muerta experimentó en mayo un récord de actividad en cuanto a la cantidad de etapas de fracturas (fracking) que registró, en el marco de la búsqueda de extracción de gas y petróleo.