Las autoridades de Shanghai, la capital económica china en el extremo este del país, anunciaron este martes que flexibilizarán a partir de mañana las estrictas medidas impuestas por el coronavirus hace dos meses, que mantuvieron confinados a millones de personas en sus hogares y prácticamente paralizaron la economía nacional.
Así lo anunció Zong Ming, vicealcalde de la metrópolis ubicada en la costa central de China, en una rueda de prensa en la que detalló que será restablecido el servicio completo de colectivos y subtes, así como las conexiones ferroviarias básicas con el resto del país.
"La epidemia se ha controlado de manera efectiva", dijo, y agregó que la ciudad comenzará el proceso de restauración total del trabajo y la vida el miércoles.
La capital económica de China, de 25 millones de habitantes, fue confinada por etapas desde finales de marzo para hacer frente a un brote en todo el país, el peor desde que comenzó la pandemia a finales de 2019.
China sigue aplicando una estrategia de "Covid cero", que tiene como objetivo neutralizar cualquier brote con pruebas masivas y aislamiento en instalaciones centralizadas de cualquier persona infectada.
Luego de suavizar varias restricciones durante las últimas semanas, Zong anunció que los residentes en las zonas consideradas de bajo riesgo podrán circular libremente por la ciudad a partir de mañana.
La anunciada flexibilización incluye también la reapertura parcial de las escuelas, los centros comerciales, supermercados y tiendas que continuarán reabriendo gradualmente y por ahora con no más del 75% de su capacidad total.
Los cines y gimnasios, sin embargo, permanecerán cerrados.
Los sitios turísticos al aire libre comenzarán a reabrir también el miércoles, mientras aquellos cuyas actividades se desarrollan en interiores deberán esperar a fines de junio, informó la autoridad de turismo de Shanghai.
Este importante paso hacia el fin del confinamiento se aplicará a unos 22 millones de personas, declaró Zong.
El cierre de la ciudad más poblada de China debilitó la economía, perjudicó la producción, limitó el consumo e interrumpió gravemente las cadenas de suministro.
Sin embargo, los últimos datos económicos mostraron que la actividad manufacturera china comenzó a recuperarse en mayo cuando el Gobierno revocó algunas medidas de contención.
Shanghai informó 29 casos nuevos ayer, en línea con una baja constante. En abril llegó a tener más de 20.000 por día.