En horas de la noche personal de Servicios Especiales y bomberos se hicieron presentes en la Unidad de Detención N°1 de Río Grande luego de que se informe sobre un posible motín en el interior de la misma.
La Jueza de Ejecución Dra. Natalia Buitrago en comunicación telefónica con FM Fuego aclaró que el hecho ocurrió dentro de uno de los pabellones, si bien surgió una versión de que los hechos se enmarcaron en un reclamo por las visitas de familiares a la unidad, los cuales se vieron interrumpidas en su gran mayoría en el marco de la cuarentena obligatoria y total dispuesta por el Gobierno Nacional por las medidas para controlar la pandemia del coronavirus, la revuelta no se habría producido por ese hecho.

La Jueza explicó que los disturbios se originaron por una pelea interna entre reclusos. “Si bien la suspensión de visitas familiares por la cuarentena puede tener a varios muy sensibles, el problema fue interno dentro del propio pabellón”.
La Jueza indicó que producto del enfrentamiento, un interno debió ser trasladado a bordo de una ambulancia hacia el Hospital Regional Río Grande, siendo asistido inmediatamente. Finalmente el recluso retornó a la unidad carcelaria, en tanto que se confirmó que el resto de los reos que sufrieron heridas (ya que se produjo un enfrentamiento entre varias personas), todos presentaban lesiones de carácter leves, recibiendo asistencia sin la necesidad de ser trasladados hacia el nosocomio.

Por otro lado, la magistrada aclaró que “Esto no tiene que ver con un reclamo al Servicio Penitenciario, al Juzgado ni a la situación en la que vivimos por la cuarentena. Se generó una revuelta entre internos porque querían sacar a unos de los internos del pabellón”.
Finalmente, la Dra. Buitrago indicó que toda la situación fue captada por las cámaras de seguridad del lugar, por lo que se analizarán las mismas y no se descarta la aplicación de sanciones internas hacia los reclusos, “incluso si algún interno quiere denunciar lo que ocurrió, lo pueden hacer como un vecino más”.
Cabe destacar que dentro del Pabellón B, lugar donde se produjeron los inconvenientes, se registró un principio de incendio, el cual fue rápidamente controlado, evitando que se produzcan daños de importancia sobre las instalaciones y el resto del personal carcelario.