Por este este hecho tomó intervención el Juzgado de Instrucción N° 2 a cargo de Raúl Sahade, llevándose adelante una serie de medidas judiciales como rastrillajes en el día posterior del incidente, para lograr dar con el arma que habría tenido en su poder uno de los detenidos y con la cual habría golpeado al damnificado.
La caratula del expediente quedó como Robo Agravado, sin embargo el trasfondo no se remitiría precisamente a esto mismo, sino más bien un ajuste de cuentas.
En ese marco, Ángel Soto Garay de 35 años y Diego Torres de 32 años que permanecen detenidos fueron trasladados a tribunales para la indagatoria, negándose a declarar sobre lo ocurrido, y luego la defensora particular, la Dra. Nora Lía Franchini solicitó la excarcelación de ambos, pedido que deberá resolver este viernes el juez Sahade.