La fiscal Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad de Buenos Aires Celsa Ramírez tomó indagatoria a 17 detenidos por diferentes irregularidades en el Superclásico entre River y Boca y realizó un operativo en el estadio "Monumental".
Ramírez, a cargo de la Fiscalía Especializada en Eventos Masivos, indagó y dispuso la libertad de 17 detenidos por los delitos de "atentado y resistencia a la autoridad", en el contexto del tumultuoso acceso al estadio.
Pero, además, la fiscal labró actuaciones por otras dos circunstancias que enmarcaron el partido de fútbol: el supuesto exceso de concurrencia -que superó el aforo permitido- y el ingreso de aficionados con bengalas.
En ambos casos, las imputaciones recaen sobre los directivos de River por infracción a la ley de violencia en espectáculos deportivos, en este caso por "omisión de recaudos".
La fiscal también investiga las agresiones que sufrieron los jugadores de Boca a la salida del campo de juego, a través de proyectiles lanzados por la afición local.
La fiscal dispuso un procedimiento en el Estadio Monumental, a cargo del Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ) y la Policía de la Ciudad, para "recabar pruebas que ayuden a tratar de identificar a los autores de las agresiones que sufrieron los jugadores de Boca, como así también los responsables de lanzar las bengalas desde la tribuna".