Este sábado argentinos y chilenos se unieron en el Canal Beagle bajo un mismo reclamo: evitar que la industria salmonera se instale en las prístinas aguas del canal. En conversaciones con Fm Fuego, Ángeles de la Peña de la ONG ecologista "Sin Azul No Hay Verde" se refirió al proyecto de ley que prohíbe la industria de la salmonicultura en la provincia.
"Esto comenzó cuando el Gobierno firmó un acuerdo para realizar un estudio de factibilidad para intentar desarrollar la salmonicultura en la provincia. Desde ese entonces la mayor parte de la comunidad está luchando en contra de que esto suceda" sostuvo.
Explicó “porque es una industria nociva que no va a generar puestos de trabajo y que va a provocar una contaminación y destrucción enorme del ecosistema del Canal de Beagle, del que todos los fueguinos necesitan y disfrutan”.
Aseguró que “se está trabajando en un proyecto de ley para que esta industria se prohíba de manera definitiva”.
En mayo del año 2019 “los entonces legisladores, Mónica Urquiza y Pablo Villegas, presentaron un primer proyecto que luego fue actualizado y mejorado, incorporando distintas voces desde todos los puntos de vista y se generó un texto superador. Dicho texto está actualmente en la Legislatura y se está tratando de impulsar que se apruebe”.
Respecto a Chile se lamentó “lo que sucedió y sucede es el ejemplo de lo que no queremos en Argentina. Tenemos que entender lo que están sufriendo nuestros vecinos para evitarlo antes de que suceda”. El pasado sábado “hicimos una travesía a través del canal y nos encontramos con nuestros vecinos chilenos que estaban manifestándose en contra de esta industria y nos encontramos hermanados por una causa, tratando de evitar que la salmonicultura siga destruyendo ecosistemas”.
“Es un negocio a corto plazo que no favorece ni siquiera ala mayoría de la población. Estamos tratando de ir por un desarrollo más sostenible, estratégico y basado en los beneficios de la naturaleza, en lugar de destruirlos” comentó.
Explicó que la salmonicultura “es una industria muy invasiva. Para desarrollarla se necesitan jaulas gigantes, del tamaño de una cancha de fútbol. Imaginate, en lugar de ver lo que se observa hoy, ver todo el canal con jaulas llenas de salmones, con redes por afuera del agua. Es una contaminación que no sólo se ve en la superficie, sino también en el fondo”.
"La utilización de antibióticos y distintos tipos de químicos va generando una alteración al equilibrio ecosistémico del canal que lo va destruyendo. En general la duración de esos puntos donde se instalan las jaulas es de 10 años” señaló.
Sobre el pasado fin de semana sostuvo “fue un día espectacular y movilizante. Ojalá traiga un buen impulso para poder seguir trabajando sobre estas cuestiones”.
“Lo ideal sería que el proyecto pueda avanzar en el corto plazo. Nosotros seguiremos tratando de contribuir a que esto suceda” concluyó.
Fotos: Joel Reyero.