Este martes por la tarde los vecinos del imputado Marcos Saldivia, quién se encuentra condición de prisión domiciliaria con el sistema de pulsera electrónica, se manifestaron en su contra y sostuvieron “no queremos a esta persona acá, pedimos que se lo lleven”.
Actualmente se está desarrollando un juicio oral no público en el cual está imputado Marcos Francisco Saldivia, acusado por abuso sexual contra una menor de edad, hija de quien, en ese entonces, era su pareja. Los episodios sucedieron entre los años 2016 y 2019.
Durante el proceso, el servicio penitenciario realiza su traslado hacia el juzgado y luego hace lo mismo en su retorno al hogar, sito en calle Espora al 1300. El día de la fecha, al ser trasladado al mismo, se registraron inconvenientes con sus vecinos, quienes apedrearon el móvil al grito de “no queremos violadores en el barrio”.
Luego de un enfrentamiento policial, las autoridades tomaron la determinación de retirarse del lugar.
Por su parte los vecinos contaron que "la policía vino hoy, nos tiraron balas, gas lacrimógeno, nosotros lo único que pedíamos es que no lo traigan, que cumpla la prisión en la unidad de detención”.
Una vecina de la zona manifestó "que se lo lleven, el no tiene que estar acá, acá tenemos criaturas, cuando se comete un error tienen que pagarlo donde corresponde, no estando en su casa" y reiteró "no queremos un violador en nuestra cuadra, pedimos que se lo lleven" sentenció.
"Si él abuso de una nena ¿cómo puede tener el privilegio de estar en su casa?" se preguntó y del mismo modo, muy movilizada por la situación dijo "cuando yo era chica lo pasé, sé lo que se siente y la tristeza que sufrió esa criatura" se lamentó.
Asimismo, el frente del domicilio de Saldivia se encuentra repleto de pañuelos amarillos, señal característica de la asociación de madres, que lleva el mismo nombre, en contra del abuso sexual.