Lo afirmó la representante de los 28 trabajadores de la firma Ambassador, que siguen ocupando la planta.
La semana pasada hubo una audiencia en Buenos Aires, donde la empresa rechazó una propuesta de trabajo del gobierno y se mantiene en su postura de que los trabajadores pasen a Newsan perdiendo sus derechos de antigüedad y categorías.
Sin novedades de relevancia resultó para los 28 trabajadores de la empresa Ambassador después de la audiencia que se realizó la semana pasada en Buenos Aires. La representante de éstos, Sandra Ragusa, dio detalles de lo que sucedió en la capital de nuestro país: "hubo una audiencia donde fuimos citadas todas las partes en Buenos Aires, porque como todos saben, Ambassador el año pasado presentó un concurso preventivo de crisis, estamos en la instancia donde la empresa tenía que presentar alguna propuesta".
"Esta es la primera vez que conocimos al apoderado de la empresa, - continuó diciendo Ragusa-, que ya hace varios años desapareció y quedó siempre al frente UOM Ushuaia, nosotros no tratábamos con ninguno de los empresarios, sino con la UOM que estaba manejando toda la situación. El 31 de julio del año pasado fuimos convocados a la planta para decirnos que fuéramos a trabajar a Newsan, pero perdiendo todos los derechos, la antigüedad, las categorías; en esos momentos no había ningún apoderado, ninguno de los dueños de la empresa que nos firmara esa autorización, por lo que si nos íbamos la planta quedaba a la deriva, la podían rematar como lo intentaron por dos pesos y nosotros quedamos a la deriva".
Respecto de la sensación que le dejó la audiencia dijo que, "fui a esta audiencia como representante de los trabajadores y lo que pude ver ahí delante del comité de acreedores es que Ambassador no tiene intenciones de negociar, no le importa nuestra necesidad de no cobrar los sueldos en casi 2 años, no le importa que se hayan robado dos años de cuotas alimentarias, que no tengamos obra social, aportes jubilatorios. Apareció con una propuesta absurda, de ir a trabajar a Newsan y abandonar la planta, pero nadie le creyó."
Respecto de la actitud que de aquí en más los trabajadores, Sandra Ragusa dijo que, "seguimos firmes adentro de la planta a pesar de no haber cobrado desde hace dos años y no nos vamos a mover hasta que aparezca una propuesta superadora. El Gobierno siempre ha estado apoyándonos de distintas maneras, incluso en la audiencia llevó una propuesta de trabajo, que es digitalización para los 28 trabajadores con el compromiso de cuidar las instalaciones y pagarnos un sueldo, pero la empresa lo rechazó.
El 15 de noviembre termina el período de exclusividad en el concurso, ahí se estaría viendo el activo y el pasivo de Ambassador, esa sería la etapa final, sino hay una propuesta de ninguna empresa, nosotros tendríamos un salvataje a través de una cooperativa que ya la tenemos conformada, estamos esperando la matrícula, seguimos resguardando nuestros puestos de trabajo".
Sandra Ragusa también expresó de que manera se comportó UOM Ushuaia, de la cual fue muy crítica al decir que, "el gremio de la UOM Ushuaia nunca estuvo con nosotros, aparentemente hubo un arreglo entre la UOM y Newsan, por eso es que los dueños desaparecieron y quedó la UOM precisamente al frente de todo el manejo y las propuestas, cuando nosotros decidimos tomar la planta, ocupar los puestos de trabajo el año pasado, la UOM nos soltó la mano, nunca se presentaron para ayudarnos, incluso cuando solicitamos esa ayuda en el 2019, ya estábamos complicados con sueldos que nos pagaban cada 3 meses al 70%, la UOM dijo que no había posibilidad de solución, porque si pedían favores después lo tenían que devolver".
Ragusa continuó diciendo que "siempre nos pusieron palos en la rueda, el año pasado nos hicieron denuncias penales, nos hicieron despedir, ellos mismos, la UOM. La denuncia penal la hizo el administrativo de la empresa conjuntamente con la UOM, que fue cuando decidimos tomar la planta, ya tenían adiestrado al personal de vigilancia y fue él quien rompió el vidrio y nos culpó a nosotros, pero en esa instancia el juez desestimo la denuncia penal, después quisieron rematar la planta, nos despidieron en plena pandemia y todo eso fue la patronal en connivencia con la UOM".
Finalmente se expresó sobre la manera que están haciendo frente con casi dos años sin cobrar los sueldos "desde el día 1 tuvimos la asistencia del gobierno, hemos conseguido algunos subsidios, módulos alimentarios, nosotros vendemos choripan los fines de semana, también hemos hecho empanadas para vender, incluso también los fines de semana tenemos una feria donde hay distintos artículos para la venta, algunos compañeros trabajan con la madera, con hierros, hacen distintos productos que se venden de 12:00 a 20:00 horas. No hay otra manera de sobrevivir después de estar casi dos años sin cobrar los sueldos se tiene que buscar distintas alternativas".