Arriagada destacó que la desregulación es un proceso que viene hace un tiempo largo, desde 1992, y que, aunque la medida fue anunciada recientemente, ya hay entre 400 y 600 empresas que operan a nivel nacional en el ámbito postal. “Esto es muy reciente salió el domingo a la noche, obviamente que nos tomó de sorpresa el tema de la desregularización, pero sabemos que igual este proceso ya viene del año 92 sobre el servicio postal. Es decir, no somos una franja exclusiva, ya dependemos entre 400 y 600 empresas a nivel nacional que abrieron y están haciendo el trabajo postal”.
“Sinceramente creemos que apuntan a otra cosa, incluso ya salió en algunos medios de que está confirmado de que van a privatizar el correo. En cuanto al personal, la situación es de incertidumbre total porque no hay mucha información que tengamos sobre que va a pasar de acá en adelante”, indicó.
En esa línea, Arriaga agregó, “Por experiencia propia puedo hablar de lo que padecimos en ese momento cuando estuvimos concesionados porque no llegamos a estar privatizados, de exigencia y especulación. Fue un proceso lamentable y es como que estamos volviendo a esos tiempos. Imaginamos que sea para bien, pero como mencione antes, no veo muy bien que esté privatizada cuando está dando ganancias, no está dando perdidas”.
En cuanto a la situación económica del servicio, dejó claro que el Correo no depende del Estado para cubrir los sueldos de los empleados. “Estuve en una asamblea el jueves y viernes de la semana pasada, y con el tema de los sueldos, se están pagando por las propias ganancias que hace la empresa, no necesitamos del Estado”, afirmó, refiriéndose a los recientes comentarios del gobierno sobre la supuesta situación deficitaria del Correo.
Sobre la desregulación en sí, Arriagada explicó que, si bien ha permitido la apertura de nuevas empresas en el sector postal, la situación no es tan sencilla. "No es tan fácil para cualquier persona abrir una empresa postal. Se necesitan condiciones y una infraestructura que no todos tienen", comentó.
Además, resaltó que el Correo sigue siendo fundamental para el país, especialmente en tiempos electorales, cuando es el único con la infraestructura necesaria para garantizar la distribución de los votos. "Con la cantidad de empleados que han sido despedidos o se han ido con retiro, hoy no alcanza el personal para garantizar un servicio electoral eficiente, por eso se han frenado porque tienen en contra esto”.
En cuanto a la realidad de la sucursal de Río Grande, el delegado señaló que la situación es compleja, con unos 26 empleados que cubren los servicios, principalmente en el sur de Argentina. Sin embargo, se enfrenta a una disparidad con el norte del país, donde se considera que sobran empleados. "En el sur estamos trabajando con lo justo, mientras que en el norte dicen que sobran", explicó.
Por otro lado, destacó que el servicio de paquetería se ha incrementado debido a la crisis económica, lo que ha llevado a muchos a emprender negocios y utilizar el Correo como medio para enviar y recibir productos. "El servicio de paquetería ha crecido mucho, especialmente por la crisis que estamos atravesando. La gente, al quedar desempleada, ha optado por emprender y pedir productos para vender", comentó.
En ese contexto, afirmó mencionó que están buscando un nuevo galpón para poder centralizar mejor la correspondencia y mejorar las condiciones laborales. Y especificó, "Actualmente, contamos con dos empresas tercerizadas, Transgroup y 30 de Noviembre, que se encargan de la distribución de la paquetería. Además, hay otras empresas que manejan el servicio de carta documento”, dijo a diferencia de lo planteado por el Gobierno. “En cuanto a la paquetería igual están trabajando con distintos pesos, no sé si hay diferencia alguna con respecto al envío de encomienda en cuanto al kilaje. No tiene sentido privatizar un servicio que está dando ganancias, eso no sería bueno para los trabajadores ni para el servicio en sí", concluyó.