Luego de conocerse el incendio desatado el domingo por la noche, a primeras horas del lunes, intervino personal de la división Bomberos de la Policía, de la Policía Científica y del Juzgado de Competencia Integral de esa ciudad, a cargo del Dr. José Silvio Pellegrino, llevándose adelante en el lugar la inspección ocular para esclarecer lo que sucedió en el predio ubicado a pocos metros del cuestionado radar inglés.
A partir de la verificación se determinó que el edificio se encontraba en desuso y sin servicios conectados ante lo cual en la pericia preliminar se descartó que el fuego pudiera haber sido generado por un desperfecto, tratándose de un siniestro “hipotético intencional”.
De ese modo, crecen las sospechas y preocupa que el ígneo guarde relación con el polémico radar de capitales británicos que opera para la firma Leolabs.