La concejal Miriam Mora volvió a exponer en la reunión de comisión del Concejo Deliberante de Río Grande, la importancia que tendría la creación de la Tarjeta Alimentaria. En diálogo con FM Fuego, cuestionó los valores comerciales del módulo que hoy entrega el municipio según lo expuesto por quien representó a la Municipalidad de Río Grande en la reunión anterior: “Cuando tuvimos la comisión anterior, trabajando en este proyecto, quien vino en representación del ejecutivo municipal, nos explicó que el módulo que entrega el municipio tiene un valor comercial de $13.000 y que el ejecutivo lo adquiría por $6.000. Nosotros hicimos la tarea, fuimos a los dos supermercados de la ciudad, a diferentes distribuidoras, nos encontramos con que este módulo que hoy entrega el municipio, no tiene el valor de $13.000, si no que, en un supermercado sale $6.400 y en el otro de $5.900, de estos 17 productos que entrega el ejecutivo municipal. No entiendo porque nos dicen que el módulo tiene un valor comercial de $13.000, la idea de la tarjeta alimentaria es justamente que alguien pueda tener esta tarjeta y pudiera comprar este mismo módulo y de otras marcas inclusive, porque la única primera marca que tiene el módulo municipal es la yerba, después el resto son todas marcas no tan conocidas. La idea es invitar nuevamente al ejecutivo municipal, hoy no participó de esta comisión, para mostrarle lo que nosotros obtuvimos en la información de los precios, el valor del módulo en la calle y el valor que nos dice el municipio al que lo adquiere”.
La concejal Mora también expresó que, “hay faltantes, no se están entregando los 17 productos, incluso el mes pasado hubo un faltante de aceite, no son primeras marcas, ya no se entrega un paquete de lentejas, se entrega una cajita, una lata de caballa, una o dos cajitas de salsa de tomate, entendemos que es un acompañamiento, un apoyo para los que no pueden, pero si alguien tiene una tarjeta, en vez de comprar batata u otra verdura, puede decidir que comprar, algunos quizás quieran comprar un pescado en vez de pollo. Lo más caro del módulo es la leche en polvo que hoy tiene un valor de $1.800/$2.000”. La tarjeta alimentaria se podría utilizar para artículos de limpieza o de higiene personal, lo que estará terminantemente prohibido es para comprar bebidas alcohólicas y cigarrillos”.
Finalmente, Mora hizo conocer su malestar por los lugares donde se entregan los módulos: “La semana pasada vi en diferentes puntos de la ciudad donde se están entregando los módulos, en la Margen Sur se hacía en un lugar intransitable, mucho barro, vi madres yendo con sus hijos a retirar estos módulos, totalmente innecesario, porque si tendrían la tarjeta podrían ir al supermercado, no se pierde el nexo con el municipio porque los convenios hay que realizarlos, se puede mejorar el sistema, de alguna manera también la dignidad de las personas, de poder ir a un supermercado o a algún comercio con su hijo y poder comprar con una tarjeta, más allá que sea el estado el que haga ese aporte en la tarjeta”.