La aparición en perfecto estado de salud de Betiana Rossi, este sábado 26 de febrero en una zona isleña del municipio de Escobar, dejó como dato saliente la cara de "escasa felicidad" con su hallazgo, por definirlo de alguna manera, que la mujer pareció mostrar en las fotos que difundió la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
También llamó la atención su arreglo y pulcritud, que permite conjeturar entonces que "no estuvo deambulando", sino que tuvo donde guarecerse, al menos en las últimas horas o días, y también la higiene y pulcritud de su ropa apunta en ese sentido.
Ahora será el turno de la Justicia de la Ciudad para avanzar y terminar seguramente cerrando la causa por su desaparición que se había iniciado en la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional Nº. 23, a cargo del doctor Marcelo Retes, con la secretaría de la doctora Valeria Hardy.
No se indicó cuándo será citada Rossi a declarar ante dicha Fiscalía, aunque a nivel de información judicial y policial se conoció un detalle curioso durante el sábado al mediodía, y es que la Policía Bonaerense no avisó a la Justicia porteña, ni tampoco a la Policía de la Ciudad que actuaba en el caso que Rossi había aparecido en unas cabañas en Escobar.
"La División Búsqueda de Prófugos tomó conocimiento a través de medios Periodísticos de la aparición de Betiana Solange Rossi, en la zona de Escobar; se sabe que el SIFEBU ni la Fiscalía fueron avisados oficialmente por la Policía local; se está realizando averiguaciones al respecto. Se ampliará", reconoció en un breve parte la Superintendencia de Investigaciones Federales sobre el caso, admitiendo que se habían enterado por la prensa de que Rossi había aparecido en esa zona isleña del municipio de Escobar.
La frase final de "se ampliará" resultó elocuente, sobre que no habían recibido información oficial alguna de parte de los hombres de la fuerza que dirige el ministro de Seguridad Sergio Berni en la provincia de Buenos Aires.