Tras la defensa de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al operativo, al destacar que "no hubo ningún incidente grave", hoy fueron usadas por los agentes granadas de gas lacrimógeno, gas pimienta y bastonazos que los manifestantes respondieron con el lanzamiento de piedras y botellas.
Por su parte, con 144 votos a favor y 109 en contra, el proyecto de la Ley Ómnibus fue aprobado después de 30 horas de debate en la Cámara Baja. Además, se estableció un cuarto intermedio hasta el próximo martes, cuando se realizará la votación en particular.
Nuevos incidentes frente al Congreso
Efectivos de las fuerzas de Seguridad cargaron contra manifestantes y los obligaron a retirarse de las calles en búsqueda de cumplir el protocolo antipiquetes que prohíbe la interrupción del tránsito durante las protestas.
Los militantes, en su mayoría de agrupaciones de izquierda, organizaciones sindicales y movimientos sociales, tuvieron varios choques con los miembros de la Gendarmería, la Policía Federal Argentina (PFA) y la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) que tomaron parte en el operativo.
Los agentes de seguridad avanzaron en formaciones compactas contra la multitud que se había reunido en cercanías del Congreso y los obligaron a retirarse hacia la Plaza, con el apoyo de hidrantes y motos que realizaban maniobras para rodear a los manifestantes.
Los uniformados arrojaron gas pimienta a un grupo de jubilados que protestaban contra el proyecto de ley, mientras se escuchaban detonaciones en medio del avance de las fuerzas de seguridad.
En tanto, los manifestantes se reagruparon en la Plaza y comenzaron a entonar consignas como "La patria no se vende".
Cerca de las 19 se registraron los primeros incidentes sobre la avenida Rivadavia, que comenzó a ser obstruida por manifestantes, sobre quienes avanzaron en distintas ocasiones las fuerzas de seguridad.