La rápida intervención de los bomberos de la policía y de bomberos voluntarios permitió controlar las llamas antes de que el fuego causara daños mayores, y la propagara a viviendas cercanas.
Personal policial también se presentó en el lugar para resguardar la seguridad de los vecinos, quienes alertaron por la densa columna de humo que salía de la vivienda.
Afortunadamente, no se reportaron heridos, ya que según informó el propietario de la vivienda, Rodrigo Garcés, estaba trabajando, mientras que sus hijos se encontraban en la casa de su madre. Las causas del incendio aún no han sido determinadas y permanecen bajo investigación.