Dicho emprendimiento comenzó hace un tiempo atrás con ayuda familiar, “No tenía trabajo y le pregunte a la mamá de mi señora si me enseñaba a hacer pan, ahí aprendí todo de cero hace un par de años”.
La venta de pan les permite cubrir sus gastos diarios, en ese contexto se ven imposibilitados de hacer frente a un alquiler, “Por el momento esto es nuestro único sustento, estamos esperando una pensión porque tengo una discapacidad en la rodilla y eso también hace que no reciban a personas con discapacidad”.
“Nosotros convivimos 5 acá, somos una familia con tres hijos y esta casilla es prestada hace un año, nos han dado unos meses más y tenemos que desocupar”, añadió.
A raíz de ello, Laura Videla sumó: “Los alquileres de por si se han ido por la nubes, hay que tener mes de depósito y se nos complica mucho. Con la entrada de los panes vivimos el día a día, con la asignación que cobro yo pagamos los impuestos de acá y el resto de las cosas que le hacen falta a las nenas”.
Los vecinas/as que estén interesados en comprar los productos ofrecidos por la familia pueden hacerlo comunicándose al 261 6519231 con Martin Cortez. El mismo se encuentra caminando por las calles de la Margen Sur ya que no cuenta con movilidad propia.