En diálogo con FM Fuego, la integrante de la Cámara de Comercio de Río Grande charló sobre las reuniones que mantuvieron con AREF para evaluar la implementación de herramientas fiscales para alivianar la situación actual del sector comercial.
Henninger explicó que “nosotros habíamos tenido diez días atrás una reunión con el Gobernador de la provincia para elevar cuadros de situación sobre los comercios en general y de los gastronómicos. A partir de allí, se articularon diferentes reuniones. La primera de ellas fue con el AREF y presentamos todas las inquietudes de todos los socios de la Cámara, la situación crítica que fuimos relevando sobre los socios y las necesidades que teníamos”.
En ese sentido, detalló: “En principio, estuvimos hablando de la necesidad de tener una nueva moratoria por ejemplo, también de la posibilidad de extender los planes de pago vigentes hasta 60 cuotas, disminuir el interés que tienen estos planes y dar algunos meses de gracia para poder pagarlos. Todos estos fueron bien recibidos y están en vigencia según la publicación del día de ayer”.
“Sobre estos sectores que son más críticos, pedimos hacer una distinción por el código de actividad para que la percepción anticipada sobre los ingresos brutos que se hace sea menor, similar al que tuvimos en 2020, y aliviar la situación de estos sectores y que no se vean tan perjudicados en un momento en el que la gastronomía está muy golpeada”, agregó.
Asimismo, Henninger valoró el diálogo que mantuvieron con ASEF: “Estos son algunos de los temas que estuvimos tratando en las dos horas de reunión. Pudimos explayarnos sobre toda la situación que estamos viviendo y agradecemos esta oportunidad de elevar estos cuadros de situación y de encontrar un equipo de trabajo que se va articulando para tener algunas soluciones. Es muy importante contar con la asistencia del estado en este momento en la que está tan complicado a nivel consumo y costos a nivel general”.
“No todos los rubros son iguales, sabemos que hay sectores que están más golpeados que otros. Todo lo que es indumentaria, marroquinería, calzado, accesorios, decoración, son todos sectores que han tenido una merma muy importante en el consumo. Otros están un poquito mejor, como la construcción”, diferenció.
Con respecto a los clientes, puntualizó en que actualmente la gente no tiene capacidad de consumo: “Si comparamos las ventas del 2021 estamos un 25% por debajo de la facturación de abril de 2019. Además, tenemos que sumar el desarrollo inflacionario de los últimos años y la presión tributaria. Otro tema también es la falta de mercadería; tenemos relevado que hay rubros que tienen mercadería de alta rotación y no les están llegando los pedidos. Hay plazos que no se están cumpliendo porque hay restricciones nuevas o porque estamos con muchos empleados contagiados o vínculo estrecho, entonces esto va corriendo los plazos de producción”.
Al ser consultada por el problema de la venta informal, comentó: “Se está sintiendo cada vez más esta competencia desleal y hablamos de la posibilidad de implementar algún programa que incentive la compra legal, trabajando de forma proactiva y tratando de que aquellas personas que han encontrado este recurso de la venta puedan llegar a formalizarse y no afecte a estos comercios que están dando una competencia leal”.
Finalmente, Henninger reflexionó que “siempre el objetivo máximo, más en estos tiempos de pandemia, es sostener la actividad comercial y los puestos laborales. El 70% del empleo en el país lo generan las micro pymes. En esta concepción de empresa, el empleado es parte de la familia. Entonces siempre tratamos de proteger el empleo por la cercanía que tenemos, y más que somos una comunidad muy chica, nos conocemos todos y tenemos algún tipo de afecto. Así que el objetivo primordial es sostener estos puestos de trabajo”.