De todos modos, el proyecto para la autorización de bonos que se utilicen para indemnizar a la empresa española se tratará el miércoles próximo en el Senado Nacional.
Luego de una semana de exposiciones de diferentes funcionarios del Gobierno Nacional para justificar el pago de unos 6.000 millones de dólares a Repsol por la expropiación del 51 por ciento de las acciones de YPF, el proyecto recibió dictamen en las comisiones de Minería, Energía y Combustible y de Presupuesto del Senado Nacional. De todos modos, el dictamen de la primera de las comisiones salió sin la firma del representante de Tierra del Fuego Jorge Garramuño, quien todavía no definió cuál será su voto cuando se trate el proyecto en el recinto.
Garramuño explicó que “la falta de mi firma no es vinculante ni significa que esté en desacuerdo. Por un lado, me parece estratégico recuperar una activa presencia del Estado Nacional en matería energética. Es algo que se había perdido y se había producido una falta de control muy grave. Además, creo que es necesario que el país vuelva a tener una relación normalizada con el mundo y que de señales de confianza a posibles inversores”.
Sin embargo, entre los cuestionamientos que planteó Garramuño, destacó que “no me convenció la tasación, tal como se presentó, porque quedó en una nebulosa un tema importantísimo como el de los pasivos ambientales. Ni siquiera (el secretario Legal y Técnico) Carlos Zannini supo explicar con claridad cómo se definirá quién se haría cargo de eso. Lo grave es que los pasivos ambientales podrían significar un incremento muy grande del monto que finalmente se pague por la expropiación de las acciones. Y para las provincias productoras puede ser muy perjudicial en el futuro”.