Los franceses confiaron este domingo un nuevo mandato de cinco años al mandatario Emmanuel Macron en el balotaje frente a Marine Le Pen, que pese a perder logró el mejor resultado de la extrema derecha en una elección presidencial en el país.
Según las primeras estimaciones, el candidato de La República en Marcha (LREM) obtuvo entre 57,6% y 58,2% de votos, una victoria más estrecha que en 2017 cuando derrotó a su rival de la Agrupación Nacional (RN) con un 66,1% de votos contra 33,9%.
Macron deberá completar su ambicioso programa de reformas interrumpido por la pandemia de Covid-19, en línea de lo recomendado por la Comisión Europea para estabilizar la economía.
Entre sus promesas para transformar Francia figura el "renacimiento" de la energía nuclear, alcanzar la neutralidad de carbono para 2050 y una medida que generó pocos adeptos: atrasar la edad de jubilación de los 62 a los 65 años. Para atraer al electorado de izquierda, dijo estar dispuesto a retrasarla sólo a 64.
Macron reelecto: la palabra de la Unión Europea
La Unión Europea "puede contar con Francia cinco años más" tras reelección de Macron, dijo presidente del Consejo Europeo, Charles Michel.
Por su parte, la titular de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, tuiteó: "Estoy encantada de poder continuar nuestra excelente cooperación".
De esta forma, los máximos responsables de las instituciones europeas felicitaron al mandatario francés por los resultados electorales, que lo consagraron para un segundo mandato de cinco años.
El jefe de gobierno alemán, Olaf Scholz, felicitó a Macron por su victoria en la elección, y estimó que sus electores enviaron "un voto de confianza fuerte para Europa".
"Felicitaciones (...)", tuiteó el responsable socialdemócrata en francés, antes de continuar en alemán: "Felicitaciones, querido presidente @EmmanuelMacron. Tus electores enviaron hoy un fuerte voto de confianza para Europa. Estoy feliz de que continuemos nuestra buena cooperación".
"El resultado es una brillante victoria", dijo Marine Le Pen sobre su derrota
Al reconocer a Macron como el nuevo presidente electo, Marine Le Pen dijo que su resultado electoral "representa una brillante victoria" pese a perder contra el candidato de La República en Marcha.
"El resultado representa en sí mismo una brillante victoria", sostuvo la candidata cuando se dieron a conocer las primeras estimaciones.
De acuerdo a los números, obtuvo entre 41,8% y 42,4% de los votos, el mejor desempeño de la ultraderecha en una presidencial en Francia. "Continuaré mi compromiso por Francia y los franceses (...) Libraré esta batalla", aseguró.
Quién es Emmanuel Macron, el reformador a prueba de turbulencias
Emmanuel Macron enfrentó desde su llegada al poder en 2017 duras protestas contra sus reformas, una pandemia mundial y las consecuencias de la guerra en Ucrania, con el mismo ímpetu con que busca ahora derrotar de nuevo a la extrema derecha.
"Piensen en lo que decían los ciudadanos británicos unas horas antes del Brexit o en Estados Unidos antes de la votación por [Donald]Trump: 'No voy a ir, ¿qué sentido tiene?' Puedo decirles que al día siguiente se arrepintieron", advirtió recientemente.
Meses antes de llegar al Elíseo hace un lustro, ya advirtió que sería un "presidente jupiterino", una expresión que, según el diccionario Larousse, evoca el "carácter dominador y autoritario" del dios romano Júpiter.
La crisis de los "chalecos amarillos" fue su máximo desafío. Esta protesta, surgida en 2018 por el alza de los precios del combustible, se extendió por Francia para denunciar las medidas hacia las clases populares de este exbanquero.
La movilización apuntaló su imagen de "presidente de los ricos" y desconectado de la realidad, que se granjeó con polémicas frases como cuando dijo que en las estaciones de tren "te cruzas con gente que ha tenido éxito y personas que no son nada".
"Creo que llegué [al poder]con una vitalidad que espero seguir teniendo, y con una voluntad de sacudir" el sistema, se justificó en diciembre durante una entrevista sobre su mandato, en la que reconoció "errores".
La "guerra" de Macron contra el Covid-19
A partir de 2020, la pandemia de coronavirus acabó con estas protestas en una nueva Francia de confinamientos y mascarillas e impulsó el perfil más "jupiterino" de Macron: "Estamos en guerra" contra el covid-19, subrayó entonces.
Su gestión personalista de la peor crisis desde la Segunda Guerra Mundial le valió los ataques de la oposición y, pese al recelo inicial de la población, supo ganarse su confianza e imponer polémicas medidas como el pasaporte sanitario.
"Las crisis requieren una hiperpresidencialización (...) En esos momentos, Macron está como pez en el agua", a diferencia de cuando el "mar está en calma", analizaba durante la campaña la periodista Corinne Lhaïk.
La actual ofensiva rusa en Ucrania representa otra crisis que sacó a relucir el hiperliderazgo del presidente que, pese a fracasar en su intento de evitar la guerra, reforzó su aura internacional entre los franceses.