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“Era necesario encarar la economía del país por otro lado”

En una nota para FM FUEGO, el economista Javier Okseniuk, dio una explicación sobre lo que está sucediendo en el país; el origen de los problemas económicos, el porqué de las medidas anunciadas y si las mismas realmente marcan un horizonte óptimo a futuro, esto último configurado a las dudas que en estos tiempos prevalecen en la sociedad.
“Diría que el contexto más inmediato que se está viviendo ahora es el de una transición entre una configuración económica, con lo que los economistas llamamos ‘grandes desequilibrios’, que son cuentas fiscales recurrentemente deficitarias, donde un Estado nacional y en algunos casos provinciales también, los gastos son mayores a los ingresos que recaudan y eso genera la necesidad de compensar esos menores ingresos con una fuente de financiamiento”, precisó.
Asimismo, sostuvo que otro gran desequilibrio que tiene una economía, “Es el balance del comercio exterior donde las importaciones son mayores que las exportaciones. Los productos que los argentinos compramos del exterior son mayores de lo que vendemos afuera. Este tipo de cosas en los últimos años fue maniatando de alguna manera con parches, restricciones y demás pero lo cierto es que ahora estamos viviendo un esquema en donde se pretende corregir esos desequilibrios”.
Ante ello, el economista indicó que las correcciones ‘generan costos para la sociedad’, “Pero podemos hablar más en detalles de que serían esos costos porque la sociedad es un conjunto muy grande, pueden haber beneficiados y perjudicados, muchos o pocos. Pero en una transición con estos costos uno puede verse tentado a pensar ‘Bueno, ¿Era necesario realmente corregir esto dados estos costos?’”.
A lo que respondió: “La verdad que sí, ya casi no había ninguna duda que era necesario encarar el asunto por otro lado, pero ¿Por qué?, porque ya hay síntomas muy serios de estos desequilibrios recurrentes que tuvo la Argentina durante las últimas décadas. Estamos década y media de virtual estancamiento, esencialmente no hemos crecido en casi 15 años”.
Respecto a esta última apreciación, añadió, “Hay muchas variables que quedaron estancadas cuando otros países realmente vieron mejorar muchas variables; el poder adquisitivo de la sociedad, la capacidad de vender productos al exterior, el desarrollo del entramado productivo y social, etcétera”.
“Acá tenemos más allá del estancamiento, una inflación estructural y creciente, este año va a cerrar cerca del 200%, y eso afectó el poder adquisitivo de la gente y además generó muchísimos inconvenientes en el funcionamiento normal de una economía. No es solamente el poder adquisitivo, tiene otros costos, no hay crédito en las entidades bancarias, hay un cortoplacismo muy acuciante, los alquileres también se ven afectados, en fin hay costos que inciden en el día a día de las personas. La pobreza ha venido creciendo y se ha afianzado, hoy no se vislumbra un atajo de corto plazo para disminuir estos niveles”, sumó.
En el marco del paquete de ajuste económico anunciado ministro de Economía, Luis Caputo, Okseniuk resumió, “En esencia pretende corregir esos desequilibrios, no es un programa de desinflación lo que comentó Caputo el martes. Es fundamentalmente un programa que pretende eliminar lo antes posible el déficit fiscal y mejorar las cuentas externas sin apelar a tantas restricciones a los productos que vienen del exterior.
“Escenario de incertidumbre”: Los resultados que arrojarían las medidas
En el marco de este estado de ánimo que se vive respecto a lo que podría suceder, el economías analizó, “Los programas de estabilización y de equilibrio de las cuentas fiscales en el contexto macroeconómico son dolorosos, siempre lo fueron y lo seguirán siendo por eso los países no quieren tener inflación porque saben que después corregirlo es doloroso”.
“En un contexto donde ya el salario viene cayendo hace muchos años, está a un 20 o 25% por debajo de lo que fue hace 5 años, imaginemos una nueva caída del poder adquisitivo es realmente una fatalidad. Ahora, yo creo que se pueden encontrar algunos paliativos adicionales, como primera línea de acción entre lo político y lo social, no descartaría que se puedan hacer algunas modificaciones como para temperar un poco más los costos generados, fundamentalmente para los sectores más vulnerados”, avizoró respecto a definiciones futuras en función a cómo evolucionarían las variables.
“Los programa estabilizadores encierran un proceso de aprendizaje colectivo, entre lo que hace el gobierno, cómo reacciona la sociedad, como el entramado político también se acomoda y cuanto más aceitado sea eso menores son los costos para la sociedad”, y consideró, “En definitiva uno puede decir si teníamos una inflación del 200% porque no puede aumentar todo rápidamente al 20% pero eso implica un proceso de coordinación que es muy difícil de dar”.
“Básicamente coordinar y sincronizar procesos de remarcación de precios de 45 millones de personas es algo complejo, no es que todos están mirando una sola variable, por eso son tan tortuosos estos tipos de programas pero tienen beneficios fenomenales. Esta década y media perdida que estamos viviendo son básicamente consecuencias de una economía desequilibrada e inflacionaria.
Y concluyó: “Si uno realmente sincronizara bien esto relativamente pronto y la madre de esa administración claramente son las cuentas fiscales. Creo que Argentina tiene todo un potencial, uno lo tiene que mirar por la positiva, el beneficio público y general puede más que compensar menormente los costos, que a lo mejor si lo hacemos bien van a estar colapsados de a cuatro y seis meses. No hay despreciar algunas medidas paliativas adicionales que permita que sea más tolerable y sustentable el proceso que inicia a partir de ahora”.

ECONOMÍA ARGENTINA

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