El proyecto, previamente aprobado en primera lectura gracias al voto doble de la Presidencia del Concejo, estaba programado para segunda lectura en esta sesión. Sin embargo, la oposición del sector privado, que había manifestado su rechazo durante la audiencia pública, y la imposibilidad de alcanzar el consenso requerido obligaron a posponer el tratamiento legislativo.
Durante las discusiones previas, se destacó la preocupación de las cámaras y asociaciones del rubro por el posible impacto negativo del impuesto, señalando que podría desalentar la llegada de turistas y comprometer la actividad económica local. También se plantearon dudas sobre el posible desfinanciamiento de la Agencia de Desarrollo (Bureau), lo que sumó incertidumbre al debate.
Con el pase a la comisión de Turismo, se busca generar un espacio de análisis más detallado, donde puedan incluirse modificaciones en base a los aportes de todos los sectores involucrados. El tratamiento definitivo del proyecto queda pendiente hasta que se logre un consenso que contemple las necesidades de la comunidad turística y los objetivos del municipio.