La decisión del Gobierno de quitar el capítulo fiscal de la Ley Ómnibus disparó las dudas sobre la posibilidad de alcanzar el déficit cero. La meta fiscal con el FMI, que por cierto se reunirá este miércoles para definir la aprobación del desembolso por USD4.700 millones, requiere un superávit primario de 2% del PBI, lo que implicaría a priori un equilibrio en el rojo financiero. Parte del ajuste se iba a hacer vía suba de impuestos y recorte de jubilaciones pero ahora esa posibilidad se ve truncada y, aunque el Gobierno señaló que la meta sigue firme, entre analistas afirman que deberá explicitarse de qué manera se logrará. El recorte sobre las transferencias a las provincias, que ya arrancó con inédita fuerza durante enero, está en el ojo de todos.
El ajuste del gasto, tal como venía siendo señalado, encontrará un posible límite en la conflictividad social. En ese sentido, la vuelta atrás con la parte fiscal de la Ley Ómnibus implicó que desapareciera virtualmente la posibilidad de intentar alcanzar el equilibrio en las cuentas mediante el blanqueo y el cobro de más impuestos a los sectores con mayores ingresos y el blanqueo.
Si el Gobierno deberá cortar gastos por el 5% del PBI, en vez del 3% (y el 2% restante lo aportaban los mencionados impuestos) al que apuntaba inicialmente el programa del ministro de Economía, Luis Caputo, entonces el ajuste encontrará grandes desafíos. Inicialmente, tanto el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, como el propio Caputo dieron señales de que la meta sigue firme. Quirno señaló en X: "Vamos a déficit financiero cero igual". En su propia cuenta de la ex Twitter, Caputo resaltó ese mensaje.
Quirno se había manifestado como respuesta a una publicación del jefe de Research de Romano Group, Salvador Vitelli, quien había señalado que la decisión oficial de quitar el paquete fiscal implicaba una resignación de aproximadamente 1,5% del PBI en ingresos tributarios y había sugerido la posibilidad de que la meta de equilibrio financiero mutara en equilibrio primario. Es decir, que pasara de un 0% de rojo en el total a un 0% solo en el primario, dejando afuera de la cuenta a los intereses de la deuda.
El economista Leandro Ziccarelli señaló al respecto: "No es tan simple como pasar de déficit financiero cero a déficit primario cero. Porque para hacer eso hay que frenar el saneamiento del balance del BCRA y ese es un paso clave en lo que intentarán mas adelante. No, van a intentar cumplir el objetivo inicial, pero por otra vía".
En la búsqueda de ganar credibilidad sobre las posibilidades del ajuste, el ex ministro de Economía, Nicolás Dujovne, reclamó que se publiquen certezas acerca de cómo se logrará: "Es muy importante que Economía muestre como va a reemplazar los recursos que pierde, eventualmente, por el capítulo fiscal de la Ley. Blanqueo y Moratoria no generan mucho en el corto plazo. Lo que sumaba YA para Nación era retenciones (0.5% del PBI) y Ganancias (0.4% del PBI). Ese 0.9% perdido se puede recuperar. Combustibles, que es todo de Nación hoy recauda 0.4% del PBI y en el máximo generó 1%. Y con todo lo malo que es el Impuesto País, hoy la alicuota es 17.5% y el Ejecutivo tiene facultades para subirla. Se puede recuperar todo lo perdido".
El director de M&R, Fabio Rodríguez, afirmó: "Tras el traspié con el paquete fiscal, Caputo solo queda haciendo política monetaria: licuación y tasa negativa, bopreal y calesita de deuda del central al tesoro. Es una normalización macro renga. Hace agua el ancla fiscal y cada vez tiene menos credibilidad la pauta cambiaria".