El proyecto fue impulsado por el ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, y establece que las parejas que estén de acuerdo podrán gestionar el divorcio ante el Registro del Estado Civil correspondiente a su último domicilio conyugal. Esto eliminaría la necesidad de recurrir a un juicio en casos donde no haya conflictos ni división de bienes.
Esta iniciativa, según explicó el Director Provincial de Registros Públicos, Martín Romero, aún está en debate en el Congreso y no puede implementarse hasta su aprobación. Señaló que el interés entre los vecinos es creciente “Pero por ahora no hay información disponible”.
¿Qué cambiaría con la nueva ley?
Con la modificación del artículo 437 del Código Civil y Comercial, los cónyuges podrán presentarse ante el Registro Civil correspondiente al último domicilio conyugal para solicitar el divorcio, sin la necesidad de intervención de un abogado.
¿Qué sucede con la división de bienes?
Si las partes llegan a un acuerdo, la división de bienes se podrá realizar en el mismo momento en que se perfecciona el divorcio en el Registro Civil. En caso de desacuerdo, la pareja igualmente podrá disolver el matrimonio en el Registro Civil y luego recurrir a un juicio para resolver las diferencias pendientes sobre los bienes.
¿Qué sucede con la tenencia de los hijos?
De manera similar, si existe acuerdo entre las partes, el régimen de tenencia y visitas se podrá establecer en el momento de la disolución del matrimonio. Si hay discrepancias, será necesario realizar un juicio para resolver la cuestión.
¿Cuándo entrará en vigencia el nuevo régimen?
Por ahora, el divorcio exprés es solo una propuesta del Gobierno. Para que se implemente, deberá ser debatido y aprobado por ambas cámaras del Congreso.
A pesar de que algunos sectores, especialmente los abogados, han expresado críticas, el Gobierno defiende el proyecto como un avance en la simplificación de los trámites. Ricardo Gil Lavedra, presidente del Colegio Público de la Abogacía de la Capital Federal, advirtió que “modernizar y simplificar los procedimientos no puede hacerse a costa de los derechos” y expresó su preocupación por la protección de la parte más vulnerable en el proceso de disolución matrimonial.
Federico Sturzenegger, ministro de Modernización, contestó que el proyecto no prohíbe el uso de abogados y que será necesario recurrir a ellos en casos de divorcios contenciosos o cuando haya hijos involucrados. “Si vos querés usar un abogado, usás un abogado. El proyecto no está prohibiendo usar abogado, ¡usá abogado! Además lo vas a necesitar inexorablemente cuando sea contencioso el divorcio o haya hijos de por medio. Pero hay muchas parejas que no tienen chicos, no tienen problemas o se ponen de acuerdo en cómo dividir los bienes... ¿por qué los obligás a pasar por un juicio?”, se preguntó el funcionario.