Claudio Tapia asumió un nuevo período al frente de la Asociación de Futbol Argentino (AFA), que aprobó un esquema de ascensos y descensos hasta el año 2026 con la idea de que la Liga Profesional en esa temporada quede conformada por 22 equipos.
La resolución se adoptó este viernes en el predio de Ezeiza luego de la asunción de las autoridades de AFA, durante una asamblea de titulares de clubes socios de la entidad.
Tapia precisamente propuso que haya dos descensos a finales del 2022, que se efectivizarán por promedios, y en las siguientes tres temporadas habrá cuatro equipos que desciendan a la Primera Nacional, división de la que ascenderán sólo dos equipos para llegar al 2026 con el objetivo cumplido.
El torneo actual está conformado por 26 conjuntos, a los que en 2022 se van a sumar dos equipos: Tigre, que ganó el primer ascenso, y un segundo que será ocupado por el ganador del Reducido que disputan Quilmes, Ferro, Almirante Brown y Barracas Central.
De esta forma, la Liga Profesional 2022 tendrá 28 competidores, con dos ascensos y misma cantidad de descensos.
La AFA oficializó a través de un comunicado la resolución que establece que en la temporada 2023 descenderán 4 equipos y ascenderán 2 (28 equipos), en 2024 descenderán 4 equipos y ascenderán 2 (26 equipos), en 2025 descenderán 4 equipos y ascenderán 2 (24 equipos) y a partir de la temporada 2026 se disputará un torneo con 22 equipos.
Por otro lado, a partir de la temporada 2022, los campeonatos se disputarán del 1 de enero al 31 de diciembre de cada año, y se computarán los promedios para determinar los descensos a la Primera Nacional.
Tapia, en su discurso, afirmó que "nos costó mucho para que nos reconozcan como autoridades. Algunos más convencidos y otros menos convencidos, pero acompañaron y siguieron. Hoy podemos poner la casa al servicio del fútbol argentino".
Y destacó que en su gestión "se logró poner de pie al fútbol y a las instituciones" y añadió que "superamos la pandemia, lo que era este virus que nos tenía tan mal. Los clubes nunca dejaron de percibir su cuota mensual de TV".
Luego, realizó un repaso de su gestión, iniciada en 2017, al recordar que "veníamos del fallecimiento de (Julio) Grondona, del 38 a 38 y de la Comisión Normalizadora. Asustaba la situación, pero teníamos el compromiso de dar orden, institucionalidad y transparencia. Se cobraba con cheques a 180 días, con menos derechos de televisión de lo que deberíamos percibir. Recibimos una casa muy endeudada, con muchísimos juicios y muy poca credibilidad".
En ese marco, reivindicó el rol de la AFA y enumeró una serie de políticas, como la forma de cobrar de los clubes, la reforma de los proyectos de selecciones y el impulso al fútbol femenino en todas sus categorías.
"Renegociamos todos los contratos con nuestros sponsors para conseguir una ecuación económica diferente y, por sobre todas las cosas, le dimos previsibilidad a los clubes. Previsibilidad en el pago, no eran más a 120 días. Eran del 1 al 10, para que cada club pueda superar la crisis económica que venía arrastrando", expresó.
Tapia también resaltó que "creamos el Departamento de Equidad y Género para estar a la altura. Sobre todas las cosas, logramos el Fair Play Financiero, algo que algunas conducciones que nos antecedieron querían hacer y no pudieron".
Y fue crítico con las gestiones anteriores al señalar que "los torneos no empezaban en las fechas previstas, a los planteles se les debían 3-4 meses. Con estos cuatro años, eso quedó en el pasado: previsibilidad en el pago, fixture programado, crecimiento edilicio, puesta en marcha de torneos, las selecciones".
El objetivo de la nueva dirigencia es ir disminuyendo paulatinamente la cantidad de equipos en Primera División y por esa razón se rechazó una propuesta de realizar un corte de seis clubes y suspender los ascensos por una temporada.