El presidente de AFARTE, Federico Hellemeyer, se refirió al impacto de la crisis por el coronavirus sobre el sector industrial y sus efectos negativos sobre la economía.
China es destino de exportaciones y también es un fuerte proveedor de insumos para industrias locales, como la electrónica fueguina. Al respecto, Federico Hellemeyer, titular de la Asociación de Fábricas Argentinas Terminales de Electrónica (AFARTE), admite que en Tierra del Fuego "todas las industrias están afectadas, en alguna medida, en sus esquemas productivos. La industria electrónica argentina también está sintiendo el impacto de esta problemática global", y añadió que "cada empresa está gestionando sus niveles de stock, sus vínculos comerciales y sus estrategias productivas".
Un alto ejecutivo de un fabricante fueguino reconoció que los envíos de componentes desde China tienen una "demora de 30 días". Por el momento, señaló, la falta de insumos no paralizó a las terminales y que hasta el momento se toman medidas coyunturales, como adelantamiento de vacaciones para el personal. "Desde China se comprometieron a normalizar la situación en junio, pero no sabemos si van a cumplir", describió.
En líneas generales, la pandemia de COVID-19 hace tambalear a la economía nacional y mundial. Las consultoras recalculan las posibles pérdidas para el país y en un primer análisis, "ya podemos asumir que, al menos durante todo el primer semestre, el golpe dolerá", resume el director de DNI, Marcelo Elizondo. Más en detalle, Abeceb estima una caída del 5% en las exportaciones, por un total de US$3.400 millones. "Por la irrupción de la pandemia se prevé una desaceleración del PBI en 0,5%, pero los últimos eventos sugieren que la caída en la actividad podría trepar hasta 1,5%", advierte la consultora.