Una serie de estudios realizados sobre la variante Ómicron en varios centros del Reino Unido, confirman que daña menos los pulmones y afecta más la garganta. Esta conclusión preliminar de los investigadores es lo que explica la baja mortalidad y el alto nivel de contagios que esta nueva cepa muestra en su comportamiento.
De este modo, los primeros informes surgidos de investigaciones preliminares, encontraron una posible explicación al bajo nivel de mortalidad que ocasiona la nueva variante, respecto de su antecesora Delta.
Los investigadores creen que el hecho de que Ómicron se focalice en la garganta, explicaría por qué esta variante es más infecciosa pero menos mortal.
"Ómicron parece más capaz de infectar el tracto respiratorio superior y afectar a las células de la garganta. Es muy preliminar, pero los estudios en marcha apuntan a esta dirección", señaló Deenan Pillay, profesor de virología de la University College de Londres.
El investigador apuntó que las diferentes mutaciones habrían alterado la capacidad de infección del virus. Por lo tanto, en el caso que el Covid-19 ingrese al organismo humano, producirá más células en la garganta, lo que aumentaría su transmisibilidad.
En cambio, reporta el trabajo publicado en el Reino Unido, las variantes que afectan más la salud del sistema pulmonar son potencialmente más peligrosas, aunque menos contagiosas.
Informes preliminares sobre Ómicron
Otro de los trabajos publicados, realizado por un grupo de investigadores de virología molecular de la Universidad de Liverpool, señala que Ómicron causa una "enfermedad menos severa" en ratones, según explica el profesor James Stewart.
Los ratones infectados con la nueva variante perdieron menos peso, tenían menos carga viral y sufrieron neumonías menos severas. A la misma conclusión han llegado científicos de EEUU.
"La prueba con animales sugiere que Ómicron es menos severa que el virus original de Wuhan o que la variante. Los animales se recuperaron más rápidamente", añadió Stewart.
Por su parte el equipo del Neyts Lab de la Universidad Leuven de Bélgica, ha llegado a conclusiones similares en un experimento con hámsters. Estos animales sometidos a la variante Ómicron presentaron menos carga viral en los pulmones en comparación con otras variantes.
En tanto, en la Universidad de Glasgow (Escocia), científicos del Centro de Investigación de Virus han determinado que Ómicron ha supuesto un cambio en la manera en que el coronavirus entra en el cuerpo. Observaron que así como escapa a la inmunidad de las personas que han recibido dos dosis de la vacuna, la tercera dosis "recupera parcialmente esa inmunidad".
Estos estudios van en la línea de los publicados en la Universidad de Hong Kong y la Universidad de Cambridge, que concluyeron que Ómicron afecta menos los pulmones. Y aunque es capaz de burlar a las vacunas, tiene más dificultades en penetrar en las células de los pulmones.