Este fin de semana la Dirección de Tránsito secuestró 50 vehículos, 25 de los cuales fueron por alcoholemia positiva en sangre.
En total, “durante los días viernes, sábado y domingo, el Municipio de Río Grande, a través de la Dirección de Tránsito dependiente de la Secretaría de Gobierno, secuestró 50 rodados en total, 25 de los cuales lo fueron por encontrarse alcoholemia positiva en sangre en sus conductores”, detalló el director General de Inspección General del municipio, José Díaz, quien agregó que “de estos secuestros, 18 lo fueron por falta de documentación, falta de licencias y seguros y 7 por emisión sonora superior a 95 decibeles”
En este sentido recordó que en la oficina de Tránsito - Estrada 770- “los vecinos pueden acercarse para que puedan medir cuántos decibeles producen los motores de sus vehículos”.
Díaz precisó que en total hubo 576 vehículos controlados, que incluyen también trabajos de concientización en donde se detiene a los vehículos y se les brinda información y consejos sobre el tránsito. El total de actas de comprobación labradas fue de 131 y pipetas sopladas hubo 223, esto es, test de alcohol en sangre”.
Desde la Subsecretaría de Gestión Ciudadana se renueva el pedido a los vecinos de que “si van a conducir un vehículo no tomen bebidas alcohólicas porque esto reduce mucho la capacidad de reacción y no sólo pone en peligro la integridad física de quien maneja un vehículo y los que van con él, sino también a terceros automovilistas y transeúntes”.
Asimismo recomiendan “tener siempre todos los papeles en regla, deben circular con la licencia, tarjeta verde o azul, seguro al día y su comprobante; si el vehículo tiene más de tres años, debe tener una revisión técnica obligatoria (RTO) al día”.
Díaz, como lo hace habitualmente, agradeció el apoyo de la Policía de la Provincia y al personal de la Dirección Provincial de Transporte por su colaboración en estos operativos de control junto a los agentes municipales de Tránsito.