RIO GRANDE.-Se conmemora el 10 de agosto el aniversario del nacimiento de la Fuerza Aérea Argentina, que se remonta al año 1912, cuando a través de un decreto, del entonces Presidente de la Nación, Roque Sáenz Peña, se creó la Escuela de Aviación Militar, en terrenos de El Palomar, provincia de Buenos Aires, registró AIM.
En la actualidad la Fuerza Aérea, responde a las demandas y necesidades de la comunidad.En este sentido, abarca un gran número de actividades:
-Realiza búsquedas y salvamentos.-Participa activamente en el combate contra incendios.
-Realiza acciones comunitarias en catástrofes naturales.
-Ofrece ayuda humanitaria a nivel nacional e internacional.
Con sus vuelos en y hacia la Antártida, abastece y mantiene comunicadas las bases y campamentos científicos en el Continente Blanco.
Desde sus comienzos, la Fuerza Aérea Argentina trabajó con responsabilidad y firmeza, para corresponder ética y profesionalmente al cuidado de los intereses constitucionales que le fueron conferidos.
Historia
La historia de la Fuerza Aérea Argentina comienza con la creación de la Escuela Militar de Aviación el 10 de agosto de 1912. Varios oficiales militares del Ejército Argentino estuvieron entre los pioneros de la aviación argentina, entre ellos Jorge Newbery, un oficial retirado de la Armada Argentina, ingeniero y aventurero, que contaba con amigos para llevar a cabo sus hazañas aéreas. Entre estos amigos se encontraban los señores Aarón de Anchorena y Carlos Muffatti Meraviglia, quien pereció en un accidente aéreo en cercanías de San Fernando, ciudad pionera en la actividad aérea de Argentina. A partir del apoyo de estos amigos, Jorge Newbery comienza a planificar el cruce de la Cordillera de los Andes en el Globo aerostático “Pampero”. De esta escuela salieron varios pilotos militares que participaron en los principales hitos de la aviación argentina, como el cruce de los Andes en avión. Se puede decir que con Jorge Newbery, se funda la aviación general (civil y militar) de la Argentina, el precursor, además aficionado del boxeo, la pintura y muy vinculado al Club Atlético Huracán. En el barrio de Villa Lugano se le recuerda y homenajea, ya que es ese territorio tuvo lugar el primer aeródromo del país.